El PP hace ‘limpia’ y coloca a Sergio Ramos en la plancha al Senado

Con la elección de Ramos para el Senado Génova frena el descontento de buena parte de los populares canarios, que no veían con buenos ojos la posibilidad de que el actual miembro de la Ejecutiva nacional fuera de número dos al Congreso por Las Palmas detrás de Guillermo Mariscal -como pretendía inicialmente el líder regional, Asier Antona-, por su escasa vinculación con la dirección del partido en las islas.

La elección de Mariscal ya había generado malestar entre quienes ven su ascenso desde el número tres -que ocupó en 2016- hasta el primer puesto como una imposición externa para premiar su cercanía al presidente nacional del PP, Pablo Casado.

Para la plancha al Congreso el PP ha optado finalmente por poner de número dos por la provincia de Las Palmas a María del Carmen Hernández Bento, que fue cabeza de lista en las anteriores elecciones de 2016, y de número tres a Jorge Rodríguez, actual senador designado por la Comunidad Autónoma. En el cuarto puesto irá el lanzaroteño Francisco Cabrera y en quinto lugar Celia Alberto, diputada en las dos últimas legislaturas, aunque ambos cuentan con escasas posibilidades de obtener escaño puesto que la previsión del PP es en el mejor de los casos mantener tres diputados por Las Palmas. Por la provincia de Santa Cruz de Tenerife el PP ha confirmado para encabezar la plancha al Congreso a Ana Zurita, que ya fue número uno en los comicios del 26J. Al Senado por Tenerife también repite en primer lugar Antonio Alarcó.

La elaboración de las listas no ha dado únicamente en Canarias quebraderos de cabeza a la dirección nacional del PP. En varias autonomías los propios populares hablan de escabechina por el poco peso que Casado ha dado a los sorayistas, mayoritariamente excluidos o relegados a puestos de escasa relevancia.