Dónde saborear Gran Canaria, según el cocinero de Anteo, Alejandro Mederos

Con su concepto callejero y lleno de identidad, Ale Mederos ha conseguido situar su bar gastronómico -como así lo define- Anteo en el mapa de la ciudad. Platos ya icónicos como el bocadillo de cochino, el taco de langostino o los huevos rotos reimaginados, conviven en una carta viva y llena de productos de primera y mucho talento.

Pero Mederos, además, es un gran comensal. De ahí que hayamos acudido a él para que inaugure este espacio y de paso aporte unas pistas sobre esos lugares que más frecuenta cuando sale de la cocina de su local. Una pequeña ruta que empieza por la mañana y termina cuando el cuerpo así lo indique.

Para empezar el día, Mederos no tiene dudas en elegir Caracolillo Coffee, en la calle León y Castillo. «Allí tienen el mejor café de especialidad de Gran Canaria, además de unos sándwiches muy buenos. Si tuviera que elegir me quedo con el Tuna Melt». Este sándwich, «de atún versionado, sin millo, con encurtidos, provolone de Mansueto y mantequilla», es una de las estrellas de la casa.

El cocinero de Anteo ofrece aquí varias posibilidades. Una de ellas, Camino al Jamonal, en La Puntilla, donde destaca sus montaditos y sus platos emblemáticos, como la ropa vieja, la ensaladilla o la ensalada de tomate y aguacate. «Otro sitio que me encanta es Pikza, donde disfruto mucho con sus platos de pasta y sus pizzas, además de con la oferta de vinos que tienen», destaca Mederos. Si tuviera que elegir uno de menú degustación, «me quedo con Bevir, sin duda».

Lea aquí el reportaje sobre Camino al Jamonal, aquí el reportaje sobre Pikza y aquí el reportaje sobre Bevir.

Seguimos en la capital grancanaria y aquí Ale Mederos elige dos locales que se han consolidado y han sorprendido por la singular propuesta y la brillante ejecución de sus platos. «Para cenar suelo elegir Nákar, donde hacen unos arroces perfectos. También suelo ir a Maraca. Me encantan las alitas de pollo a la brasa y deshuesadas, son adictivas».

Lea aquí el reportaje sobre Maraca.

Para terminar esta ruta del placer, y continuando con las buenas elecciones del comensal, los pasos se dirigen a la calle Thomas Alva Edison, donde se encuentra la coctelería Alma y Mezcla. «Es un sitio perfecto para cerrar la noche. Cócteles de lujo y un ambiente de diez. Si no lo conocen deben ir a probar la experiencia». Lea aquí el reportaje sobre este local.

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