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Según los datos que aporta el sondeo de Técnicos en Socioanálisis que viene publicando CANARIAS7, el nacionalismo canario resiste ante el fuerte impulso que experimentan las fuerzas estatalistas y el tsunami neocentralizador que se vive en el conjunto de España, en buena parte estimulado por las reacciones ante la crisis territorial catalana. El aumento de Nueva Canarias, casi tres puntos porcentuales más que en 2015 (un 25% de papeletas más) ganando uno o dos escaños, compensaría el nuevo retroceso de Coalición Canaria, que podría perder el 10,7% de los votos, y entre cuatro y seis actas parlamentarias, pasando del 18,5% al 15,8%.

El conjunto del nacionalismo llegó a alcanzar casi el 43% de las papeletas en las elecciones de 1999, entre el 37,50% de la lista a la Presidencia encabezada por Román Rodríguez y los aportes de AHI (que fue esta vez por su cuenta) y, sobre todo, de la Federación Nacionalista Canaria (4,9% de los sufragios) que lideraba Juan Manuel García Ramos.

Pero a lo largo de este siglo ha ido perdiendo peso en las diferentes confrontaciones electorales. En los más recientes comicios autonómicos, los del año 2015, el nacionalismo sumó 260.613 sufragios (rozando el 29% del total) y la encuesta de abril de 2018 les atribuye conjuntamente a CC y NC un ligero incremento, hasta alcanzar algo más de 275.700 papeletas, un 29%. Parece que se frena su retroceso en porcentaje y en votos.

Eso sí, bajaría en escaños. De 23 escaños en los pasados comicios pasaría en estos momentos a una franja entre 18 y 21. Se estrechan las distancias entre CC y NC: si en el actual Parlamento son de once escaños, podrían quedarse entre 5 y 8. Si antes eran siete puntos y medio, ahora podría reducirse a 2,6 puntos porcentuales. Estas diferencias sufrirían pequeñas variaciones si CC cierra su acuerdo con la formación que dirige José Miguel Bravo de Laguna o si NC alcanza un entendimiento con alguna fuerza insular o autonómica.

Por islas, el nacionalismo sube en Gran Canaria, se mantiene en Lanzarote y baja ligeramente, entre uno y dos puntos en el resto de los territorios, salvo en La Palma, donde es más significativo su retroceso.

gran canaria. En la isla de Gran Canaria experimenta una ligera subida en expectativa de voto, pasando ese espacio político del 25,2% al 27,8%, es decir, 2,6 puntos porcentuales de incremento. Pero con comportamientos electorales diferenciados: NC asciende casi cuatro puntos y CC pierde 1,3, que podría recuperar y superar si al final fragua su alianza con Bravo de Laguna, a cuya formación otorga el sondeo un 3,5% en la isla.

Pero, según el estudio sociológico, sería la isla, tras La Gomera, con menor peso del nacionalismo. Situación condicionada, en buena medida, por el pequeño aporte –pese a la sensible mejora respecto a 2015- de Las Palmas de Gran Canaria, donde se concentra el 44% de la población de su territorio insular.

Lanzarote llegó en su momento a suscitar el 56,7% de los apoyos a planchas nacionalistas, de las que el 28,5% correspondió a CC y el 28,2% al PIL, quedándose este último sin representación. Sucedió en 1999, pero las cosas han cambiado mucho desde entonces, especialmente por el progresivo deterioro y casi práctica desaparición del PIL. En 2015, el nacionalismo representó el 39% de las papeletas. El sondeo le estima ahora un 39,2%, una gran estabilidad, con un pequeño trasvase: el PIL en sus mínimos históricos, una leve pérdida de CC, de apenas 1 punto porcentual, y un aumento de 2 de NC, que pasaría del 8,5% al 10,5%.

En Fuerteventura, CC retrocede tres puntos y NC crece cuatro (gracias a su alianza con Asambleas Municipales de Fuerteventura, AMF). El conjunto del espacio nacionalista disminuye del 40% al 36,7%.

Tenerife, antaño bastión inexpugnable de Coalición Canaria, observa como esta viene perdiendo fortaleza elección tras elección. En las últimas, las autonómicas de 2015, llegó al 28%. El sondeo le augura un 24,3%. El leve aumento de NC –del 3,5% al 5,1%- no compensaría la situación y el nacionalismo estaría por debajo del 30% de apoyo en las urnas.

Pero donde en mayor medida se puede percibir el retroceso de CC es en la isla de La Palma, donde podría pasar del actual 30,6% al 24,3%, lo que supone una reducción de más de seis puntos porcentuales. NC se queda en apenas un 5%. Y el nacionalismo en su conjunto pasaría del 33,4% al 29,4%.

En El Hierro, la encuesta otorga en estos momentos un 47,5% al nacionalismo, muy similar al 48,8% de 2015. Con algunos cambios en los apoyos a las organizaciones que lo representan en la isla del meridiano: AHI-CC pasaría del 42,2% al 39,7%; y NC, del 6,6% al 7,8%.

la gomera. Por último, en la isla de La Gomera, como viene ocurriendo en las últimas legislaturas, el nacionalismo ha sido barrido por Casimiro Curbelo. En su momento llegó a alcanzar el empate en escaños con el PSOE que entonces lideraba Curbelo, en 1995, y a partir de ahí mantuvo un escaño por la isla hasta 2011. En los últimos comicios el reparto fue ASG (3), PSOE (1). CC y NC sumaron un 16,8% que ahora se podría ver reducido al 14,4%. Aunque no hay que olvidar que CC y ASG gozan de una estrecha relación en la Cámara canaria. Los datos que arroja la muestra no parecen excesivamente sorprendentes y da la impresión de que vienen a consolidar las tendencias que se han ido produciendo en los últimos años. Y, eso sí, confirman que sigue habiendo un espacio nacionalista que goza de significativos apoyos ciudadanos, pero que al tiempo padece las consecuencias de su disgregación.

Algunos apuntarán que juntos serían claramente primera fuerza en votos y en escaños, pero eso es muy especulativo. Aunque puede que sea así –y en la encuesta hay una mayoría favorable al entendimiento e incluso a su presentación conjunta a las elecciones- soy de la opinión de que en las urnas no se produciría una suma automática de lo que se proyecta para cada una de las organizaciones por separado.

Con toda seguridad, las direcciones de los partidos que se reclaman de este ámbito, CC y NC, uno al frente del Gobierno de Canarias y otro en la oposición, analizarán con mucho detalle este y otros sondeos para diseñar sus estrategias de cara a los comicios locales, autonómicos y europeos que se celebrarán dentro de un año, en mayo de 2019.

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