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Carrión saluda a Ancelotti antes del inicio del encuentro en el Gran Canaria. Efe
Resaca feliz tras el 1-1 ante el Madrid: «Esta es la UD que todos queremos ver»

Resaca feliz tras el 1-1 ante el Madrid: «Esta es la UD que todos queremos ver»

Fútbol ·

El protagonismo creciente de varios nombres propios, Moleiro y Cillessen a la cabeza, y el convincente rendimiento colectivo alimentan un futuro de optimismo

Ignacio S. Acedo

Las Palmas de Gran Canaria

Viernes, 30 de agosto 2024, 12:20

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Moleiro justificando su cláusula de 60 millones, tras retratar a Militao en una baldosa para levantar al Gran Canaria con el 1-0, Cillessen de paradón en paradón, enorme los pulmones de Sandro, un titán a la hora de presionar y sudar la camiseta, qué decir del nivel imperial de Álex Suárez, marcando frontera ante el mismísimo Mbappé, un Marvin de nuevo en su versión más ortodoxa, la aparición estelar del inédito Campaña dando poso y madurez al resto, Kirian en crecimiento, McBurnie incansable en su función de abrir y espacios y desgastar a los centrales...

Dejó tantos y tantos nombres propios el empate de la UD ante el Madrid, por buen rendimiento y prestaciones óptimas, que habría que incluir hasta a los suplentes que no tuvieron minutos por su labor desde la banda completando un grupo que salió doctorado el jueves por la noche de Siete Palmas.

Álex Suárez firmó una actuación enorme. Cober

«Esta es la UD que queremos ver», se repetía tras el choque en palco y vestuarios, con la satisfacción compartida por la demostración colectiva ante el vigente campeón de Liga y de Europa. Incluso Moleiro se permitió la licencia de lamentar que el punto «sabía a poco» porque, al igual que se pudo perder, durante una fase del partido, cuando lucía el 1-0 en el electrónico, se rozó otro más que hubiese puesto todo en franquicia. McBurnie no pudo conectar un gran servicio de Sandro, el propio Sandro tuvo una acción, algo escorada, que se perdió en el limbo, varios saques de esquina en los que siempre se iguala todo...

Vitamina para Mendizorroza

La resaca de la visita del Madrid fue dulce, reconfortante después de venir de lo de Leganés y, lo más importante, una vitamina incalculable para encarar la visita al Alavés desde la confianza y la seguridad. El desgaste físico y el disponer de menos descanso que el conjunto vitoriano, que jugó el miércoles, son los efectos menos prometedores, aunque el factor mental, con el subidón que dejó una noche de las que no se olvidan, puede ayudar a reponer fuerzas en tiempo récord.

Moleiro, aclamado tras su cambio. Cober

La UD sigue sin ganar, y ya son 17 partidos consecutivos en Primera, pero ese dato queda relativizado por la progresión experimentada y que, sin duda, marca el camino para lo que viene. Luis Carrión querría tener algún punto más a estas alturas del calendario y, mayormente, irse al parón que ahora viene con la despensa más surtida después de pasar por Mendizorroza. Por eso está marcado en rojo el compromiso en Álava, donde el precedente es positivo (0-1 el pasado mes de diciembre con gol de Kirian).

Sandro se lleva el esférico ante Vinicius. Efe

Nadie duda en Barranco Seco que con el índice de intensidad y concentración que se exhibió frente al Madrid va a alcanzar en la mayoría de los partidos para tener opciones y, en una amplia muestra, ver recompensado esos méritos en el marcador. La primera prueba llega en horas y medirá, también, el termómetro de una UD que funcionó a ratos ante Sevilla y Leganés y se instaló en una mayor regularidad frente al adversario más complejo. Una paradoja que, no obstante, se celebra, pues debe ejercer como revulsivo y liberar a los jugadores del vértigo veraniego que, de momento, les ha impedido ganar.

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