Siete buques de la flota fantasma rusa atraviesan Canarias esta semana sin ningún tipo de control
Portaban más de 250.000 toneladas de hidrocarburos y uno de ellos, no tenía incluso bandera, algo prohibido en el ámbito marítimo. El ataque esta semana en Senegal a un petrolero con refinados rusos enciende las alarmas en el archipiélago
El paso por aguas de Canarias de todo tipo de buques, algunos con carga de dudosa legalidad y bajo todo tipo de pabellones es algo habitual. Muchos de ellos son viejos petroleros que transitan por las aguas que cruzan las islas cargados de crudo de procedencia rusa aunque, tanto sus armadores como sus banderas son de terceros países, en un intento de camuflar su origen y escapar del bloque que Europa impuso en 2022, tras la guerra de Ucrania, a las exportaciones rusas.
La llamada flota fantasma rusa o 'darkfleet' intensificó su paso por las islas tras el cierre del Mar Rojo por el conflicto de los hutíes. Se estima que entre 2024 y lo que va de año pasaron por las islas unos 600 buques de estas características.
El descenso de la tensión en la zona y el anuncio de varias navieras de que regresarán a su ruta habitual por el Canal de Suez hacía prever un descenso del tránsito de estos buques por Canarias, considerados por los expertos, como es el doctor en Marina Civil, Rafael Muñoz, como «auténticas bombas de relojería medioambientales». Como explica, estos barcos «operan al margen de las aseguradoras de prestigio y lo hacen bajo entidades diseñadas 'ad hoc' o empresas pantalla para no dar con su armador real». Muñoz apunta que en caso de producirse un accidente y una marea negra sería «una auténtica catástrofe » para las islas, uno de los principales destinos turísticos del mundo. Máxime si tenemos en cuenta la imposibilidad de poder llegar a los armadores de estos buques y reclamar sanciones e indemnizaciones ante cualquier vertido.
Pese a las previsiones de descenso del tránsito de estos buques por Canarias al bajar la tensión en el Canal de Suez, la teoría no se ha cumplido y solo en cinco días de esta semana han atravesado las aguas internacionales que separan las islas y más en concreto, en el canal entre Fuerteventura y Gran Canaria siete buques cargados con más de tres millones de barriles de hidrocarburos. Traducido en toneladas hablamos de más de 250.000 toneladas. Y todo ello, sin ningún tipo de vigilancia o control activo del Gobierno de España pese a que es Zona Económica Exclusiva de España. A efectos prácticos, aunque España no tiene soberanía sobre estas aguas internacionales sí tiene jurisdicción medioambiental, pero ejecuta «una política marítima aparentemente laxa», como explica Muñoz.
Por parte del Ejecutivo canario, su presidente, Fernando Clavijo, expresó hace unas semanas su preocupación por este el tránsito de estos buques pero sin mayor reclamación ante Madrid pese al riesgo real para las islas. Uno de los buques que cruzó esta semana por las islas lo hizo a solo 8 millas, unos 16 kilómetros, de Costa Calma, en Fuerteventura.
«Que ocurra un accidente es una mera cuestión de tiempo, ya sea por mala praxis, un temporal con buque a la deriva cerca de costa, o un acto de sabotaje como vienen perpetrando facciones ucranianas, una de ellas en Dakar, en un buque que ya transitó entre las islas (el 'Mersin', ver información de abajo)», indica Muñoz, que considera que la Armada o el Ejercito del Aire debería estar pendiente del paso de estos buques y someterlos a vigilancia en su paso por las islas más allá del control estadístico que realiza.
De los siete buques que han pasado esta semana llama especialmente la atención el 'Unity', que pasó por aguas de Canarias el pasado 1 de diciembre, procedente de puertos rusos y con destino a China con casi un millón de barriles de crudo, sin pabellón, es decir, no tenía bandera, algo que está prohibido y es un delito en el ámbito marítimo.
Sin embargo, nadie dio la voz de alarma ni el buque apresado o obligado a alejarse de Canarias. «España no tiene una política marítima activa con un cuerpo de guardacostas en el mar para apresar un buque que no cumpla con la normativa internacional, así que esta función debería recaer en la Armada, que no parece muy activa en las aguas circundantes al archipiélago salvo episodios puntuales. Navegar sin nacionalidad es un acto flagrante de incumplimiento del derecho marítimo internacional. No imagino algo así en Francia o Reino Unido, la política marítima española es muy mejorable y su inteligencia naval debería dedicar más recursos a estas cuestiones», lamenta Muñoz, que se pregunta si la tibieza del Gobierno español es fruto de su dejadez o de la falta de política marítima .
Otro de los petroleros darkfleet de paso esta semana fue el 'Faas', que navegó con bandera de Malaui con más de un millón de barriles de crudo. Como explica Muñoz, generó una situación «preocupante», puesto que pese a pasar por aguas jurisdiccionales lo hizo a escasas 9 millas de la costa oriental de Fuerteventura «ejerciendo su derecho de paso inocente». «Sería razonable, con las islas en el eje del tráfico del petróleo ruso, que la Armada se anticipara a los tránsitos de estos buques potencialmente peligrosos y se enviase un mensaje de control al exterior. Si este buque se hubiera quedado sin gobierno, el remolcador de altura más cercano con capacidad para sujetarlo, habría tardado 10 horas», manifiesta.
Por lo que respecta al resto de los buques que cruzaron esta semana las aguas internacionales que transcurren entre las islas y son Zona Económica Exclusiva de España, se trata del 'Pegasus, con bandera de Gambia y que portaba gasóleo refinado; el 'Chiba' con bandera de Panamá; el 'White Condor', con bandera de Aruba y destino Brasil, el 'Sea Maverick', de bandera de Sierra Leona y que iba para Dakar, y el 'Yorik', con bandera de Gambia y que se dirige a Banjul.
El ataque en Senegal al petrolero ruso enciende las alarmas
Algunas fuentes apuntan a que el buque fue objeto de un ataque por parte de drones ucranianos en un intento de dañar los ingresos económicos que Rusia obtiene de la venta de su crudo, que se sigue produciendo a pesar de las sanciones porque se camufla bajo armadores y banderas de buques de terceros países.
El suceso apenas ha tenido repercusión mediática ni en España ni en Canarias, pese a que una marea negra podría tener efectos en Canarias. Por ahora se desconoce si el buque se ha hundido o no. La última noticia que ha trascendido es que las autoridades senegalesas estaban haciendo un esfuerzo por contener el vertido de crudo.
El doctor en Marina Civil, Rafael Muñoz, advierte del riesgo de Canarias con este tráfico si facciones ucranianas deciden perpetrar un ataque de estas características en aguas próximas a Canarias. «En La Luz son habituales las escalas de buques tanque de terceras banderas, pero con crudo o refinados rusos», advierte. De hecho, agrega, en los en los últimos diez días hasta cuatro gaseros de LNG, sancionados por Reino Unido, «se han colado» en Las Palmas para hacer escalas de bunker u 'Off Port Limits'.
Como señala Muñoz, estas escalas son técnicamente legales aunque moralmente plantea dudas. «¿Se entera de esto la inteligencia naval española? ¿Se atrevería Ucrania a perpetrar un golpe en jurisdicción española como ya lo ha hecho en aguas de jurisdicción turca o senegalesa?», se pregunta este experto.
Días después del ataque en Senegal el armador turco del 'MT Mersin', Besiktas Shipping ,comunicó en redes sociales (X), que suspendía todas sus operaciones de transporte marítimo con Rusia. Besiktas Shipping destacó que la situación de seguridad en la región ha empeorado significativamente, haciendo que los riesgos para los buques sean inaceptables. Como apuntó, el incidente de Senegal no es aislado: anteriormente, otros petroleros como el 'Kairos' y el 'Virat' sufrieron ataques graves en el Mar Negro, reconocidos por los servicios de seguridad ucranianos.
La medida de Besiktas Shipping refleja la creciente vulnerabilidad de rutas marítimas internacionales, especialmente en regiones con tensiones geopolíticas o conflictos activos.