203 muertes por las altas temperaturas en un año en Canarias: «No hay conciencia de que el calor mata»

Por islas, Tenerife es la que presenta mayor mortalidad por calor, 100, seguida de Gran Canaria con 81. Entre ambas concentran el 89% de los decesos. El estudio también contabilizó ocho muertes en Lanzarote, seis en La Palma, cinco en Fuerteventura y tres en La Gomera. En El Hierro no se produjo ningún fallecimiento atribuible al calor en 2022.

«La mortalidad en Canarias es bastante menor que en la península. En proporción por población también hay mucha menor mortalidad que en la península y eso lo achacamos a que la mayor parte de la población canaria vive en la vertiente norte, con temperaturas mucho más atenuadas que en la sur. Si todos viviéramos en Tirajana tendríamos la misma mortalidad», añade Cabrera.

Con todo, son 203 muertes «evitables», de ahí, añade el presidente del colegio médico, «la trascendencia» de concienciar sobre ello en verano, máxime cuando este jueves se espera que las temperaturas lleguen a los 41ºC en algunas zonas de Gran Canaria. «No se le da importancia y es un tema muy importante. La población debe saber lo que significa y lo que hay que hacer en plena de ola de calor», abunda.

«Eso es variable. A nivel de supervivencia empieza a contarse a partir de una temperatura ambiente de 35º con una humedad relativa de 75% porque es muy importante la humedad relativa asociada a la temperatura el cuerpo. Cuando el cuerpo tiene exceso de calor lo combate enfriándose a través del sudor. Pero no por estar mojado sino porque el sudor, al evaporarse, produce frío. El dintel está en el 75%. Si tenemos una humedad superior el sudor casi no se evapora y la sudoración se vuelve ineficiente», explica.

Pedro Cabrera señala que hay «dos tipos de muerte por calor». El 90% de ellas, añade, se producen en «las poblaciones vulnerables o de riesgo que son fundamentalmente las edades extremas de la vida: la primera infancia, como la muerte de un niño hace pocos días en un coche, el niño se puede morir en cuatro horas. Y los ancianos. También enfermos crónicos fundamentalmente cardíacos y con EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica). Otros son los grandes obesos, las embarazas y gente normal que se expone a altas temperaturas después de consumir drogas como alcohol y cocaína. El 90% de las muertes responden a este patrón».

El otro 10% muere por lo que se llama un «golpe de calor». Una «persona normal que se somete a un calor excesivo, como los agricultores -ya ha muerto alguno este verano en España-. Cuando el cuerpo alcanza una temperatura de 40,5º empiezan a tener disfunción del sistema nervioso central, mareos, dificultad para mantenerse en pie, en el habla,... Cuando veamos a una persona así eso es una urgencia médica de primer nivel porque el golpe de calor tiene tres fases y cuando se entra en segunda y tercera te empiezan a fallar los órganos interiores del cuerpo y la mortalidad supera el 50% de los casos», advierte.