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Rosa Rodríguez y Santa Cruz de Tenerife
Viernes, 16 de noviembre 2018, 10:01
Canarias tiene en sus aulas a 28.310 escolares extranjeros, una cifra que se eleva a 36.000 si se cuenta a los niños y niñas ya nacionalizados españoles nacidos en otro país. Se trata de una realidad que ha obligado al Gobierno de Canarias a poner en marcha diversos programas de integración efectiva de alumnos migrantes que ha llamado la atención de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE). En palabras de su jefa de la División de Infancia y Escuelas, Yuri Belfali, son «muy interesantes», pues Canarias, además de intentar mejorar los resultados, trabaja, dijo, para «garantizar las equidades» y que los alumnos, ya sean migrantes o procedentes de familias desfavorecidas, «puedan beneficiarse de esa igualdad de oportunidades».
La OCDE ha elegido Canarias para celebrar ayer y hoy su quinto Foro de Políticas Educativas dedicado en esta ocasión a la integración de estudiantes migrantes y refugiados en regiones ultraperiféricas, que coordina el viceconsejero de Educación y Universidades, David Pérez-Dionis, quien destacó entre los proyectos más singulares del plan de atención a la diversidad el de apoyo idiomático para escolares extranjeros, además los de apoyo educativo y de mejora de la convivencia puestos en marcha por la Consejería de Educación.
Que Canarias roce el 7% de población escolar extranjera, según el último informe de Datos y Cifras del Ministerio de Educación, es, a juicio del presidente del Ejecutivo, Fernando Clavijo, encargado, junto a Yuri Belfali, de inaugurar el encuentro, una realidad que, además, se ha convertido en «una oportunidad» que enlaza, dijo, con la estrategia de internacionalización de la educación no universitaria puesta en marcha en el archipiélago. Una de sus líneas, explicó Pérez-Dionis, es la celebración de encuentros como este, que fomentan la colaboración y el trabajo con otros países.
Clavijo también destacó que este foro de la OCDE no solo servirá para radiografiar la enseñanza pública canaria, sino para conocer las herramientas utilizadas para la integración efectiva de alumnos migrante. Desde su punto de vista, las islas son «un espejo en el que pueden verse reflejados otros territorios» porque la Educación se ha usado, dijo, para fortalecer la convivencia desde la diversidad.
Yuri Belfali destacó la importancia de la integración de niños migrantes y refugiados para promover el bienestar individual, resaltando que muchos países dan importancia a la integración de estos niños no solo porque sea un aspecto relevante sino porque esas políticas se relacionan directamente, dijo, con el desarrollo.
En su intervención el quinto Foro de Políticas Educativa de la OCDE, titulado La diversidad hace la fuerza: La integración de estudiantes migrantes y refugiados en regiones ultraperiféricas, Belfali hizo además hincapié en la importancia de «entender mejor los desafíos específicos» de los estudiantes extranjeros que van a la zaga y «los factores que están vinculados a su bajo rendimiento» para reducir la brecha con el resto de escolares. Igualmente pidió la representante de la OCDE atender a las necesidades de los docentes, para quienes, dijo, es «un desafío» la atención a los estudiantes migrantes.
Pero, pese a los halagos que Belfali brindó a Canarias por los «esfuerzos que está haciendo» en este ámbito, no hay que perder de vista que del análisis de los resultados del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA 2015) de la OCDE se desprende que el 21% de los alumnos inmigrantes que están en la escuela canaria no se siente integrado. A ese porcentaje llega un estudio elaborado por Convivencia Cívica Catalana a partir de los resultados de PISA 2015.
También los inmigrantes presentan una mayor tasa de abandono escolar en España. Las desventajas socioeconómicas y las barreras del idioma son los principales obstáculos que enfrentan los estudiantes extranjeros «para triunfar en la escuela y la sociedad», según el informe de la OCDE, La resiliencia de los estudiantes de origen inmigrante, publicado el pasado mes de marzo.
Ayer, Yuri Belfali se refirió al aumento de la migración y la gran implicación que en él tiene del sector educativo y, también, a como Canarias lo ha experimentado en los últimos años. A su juicio, la integración en los colegios e institutos es «esencial para el futuro de los niños migrantes y refugiados».
La OCDE ya apuntaba en su informe la necesidad de políticas sociales y una educación más eficaz y mejor dirigida para ayudar a los niños migrantes a integrarse.
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