Tomás Morales necesita «más tiempo»

A pesar de la información hecha pública, y de los grandes paneles que indican la nueva ordenación del tráfico en la zona, los conductores de Las Palmas de Gran Canaria todavía no se hacen a la nueva medida. La banda de aparcamientos todavía amanece con algún vehículo estacionado en el tramo que va desde José Bosch y Sintes hasta Murga. El pasado jueves, por ejemplo, uno. Pero una vez actúa la Policía Local el carril apenas se utiliza durante las dos horas en las que la circulación está permitida.

Son los taxis, siempre al detalle de lo que se cuece en la circulación en la capital, los que más recorren los metros habilitados durante el comienzo de la jornada laboral. Metros que, además, son menos de los previstos en el proyecto concebido en primera instancia por Heriberto Dávila, asesor del área de Movilidad del gobierno local.

Inicialmente el tramo afectado por la experiencia piloto iba a ser el que va desde José Sintes y Bosch hasta el Obelisco, pero desde el primer día de la prueba se limitó a llegar hasta el encuentro con Murga. El recorrido que se encuentra frente a los institutos sigue ocupado cada jornada en esa franja horaria por los coches estacionados y por los contenedores de basura.

Fuentes del departamento municipal son cautos con los resultados que por el momento deja la medida, puesta en práctica el pasado 24 de octubre. «La prueba piloto en Tomás Morales es valorada positivamente por el área de Movilidad, si bien se entiende que hace falta algo más de tiempo para su evaluación definitiva», refieren.

Una de las imágenes habituales de cada jornada es la de los coches estacionados en la zona restringida. Un hecho que obliga a actuar a la grúa de la Policía Local desde temprano, a pesar de la información que se encuentra perfectamente señalizada en la zona. «Durante los primeros días es verdad que todavía aparcaban coches, pero con el paso de los días se ha ido a menos. Entendemos que pronto todo el mundo tendrá conocimiento y la vía estará despejada», comentan desde Movilidad.

Eso, por lo pronto, ofrece un punto de vista optimista por parte de Movilidad. «Desde el punto de vista del tráfico se ha notado una mejoría y mayor fluidez cuando la vía ha estado despejada y podía ser usada como carril de circulación», significan.

Por ello aseveran que todavía la experiencia piloto se encuentra de recibir y procesar todos los datos, por lo que aunque se prevé continuar definitivamente con la medida de momento tendrá un periodo en prácticas. «En cualquier caso, se continúa testando para evaluar definitivamente su éxito. Al menos hasta final de año se continuará con la prueba», indican.

El planteamiento posterior a esta experiencia piloto es la de trasladar a otras zonas de Las Palmas de Gran Canaria cuya densidad de tráfico también sea compleja la medida. Por el momento en Tomás Morales se seguirá desarrollando a la espera de que los conductores de la ciudad se familiaricen más con ella y acaben utilizando el tramo del carril adicional, al que se le ha pintado en amarillo sobre el asfalto una señal de ceda al paso al llegar al cruce con la calle Murga, final por el momento de la nueva regulación para la circulación de la ciudad.