Si le cae una piedra en El Confital es su responsabilidad
«Quien se aventure a pasear por este lugar, asume un peligro que será de su exclusiva responsabilidad». Como Poncio Pilatos, con los nuevos carteles, el Ayuntamiento se lava las manos respecto a cualquier accidente por desprendimiento que ocurra en El Confital. El concejal de Ciudad de Mar explica que se trata de un texto estándar que se pone en todos los municipios.
El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha colocado varios carteles en la zona del Confital en los que se exime de cualquier responsabilidad ante cualquier accidente que puedan sufrir los ciudadanos como consecuencia de desprendimientos de la ladera.
Tras un mensaje de bienvenida, se informa en español e inglés, de que «este lugar está sometido a riesgos naturales y constatados de desprendimientos». Pero luego viene la curiosa advertencia: «Quien se aventure a pasear por este lugar asume un riesgo que será de su exclusiva responsabilidad».
El concejal de Ciudad de Mar del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, José Eduardo Ramírez, aseguró que el texto es habitual en lugares de costa en los que puede haber desprendimientos y como ejemplo de ello muestra uno similar, con el mismo texto exacto, que fue colocado por el Consistorio de la Villa de La Orotava, y otro en Candelaria. «Son textos iguales para toda España», detalla, «están estandarizados y en Canarias hay muchas playas con esta señalización».
Los carteles fueron instalados este miércoles después de que los anteriores volvieran a ser robados. En los últimos tiempos, el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha tenido que reponer la cartelería del Confital hasta siete veces como consecuencia de los hurtos. A ello se suma la sustracción del váter y otras piezas del baño de la caseta del Confital el pasado fin de semana.
Los derrumbes en esta zona han sido relativamente frecuentes en los últimos años: en 2015 se produjo un desprendimiento que afectó al yacimiento arqueológico de Las Coloradas y que alcanzó a la zona del paseo; y este mismo año, a consecuencia de las lluvias de mayo, se volvieron a cerrar los accesos por la caída de piedras.
Ramírez indicó que los informes del Cabildo de Gran Canaria reiteran que «no hay ningún tipo de medida de protección que pudiera soportar un desprendimiento», si bien lanzó un mensaje de tranquilidad diciendo que la malla instalada «hace poco probable que las piedras lleguen a un punto tan bajo» como el paseo.
El portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento, Juan José Cardona, entiende en cambio que estos carteles son un ejemplo de «irresponsabilidad» porque «si existe un riesgo real, hay que evitar el paso, y si no hay riesgo, no se puede colocar este tipo de cartel». En su opinión, lo que hay que hacer es actuar «sobre lo que origina el riesgo, pero no cerrar los ojos, ni mirar a otro lado alegando que el Ayuntamiento se exime de tener su responsabilidad como autoridad».
Cardona insistió en que estos carteles son «de una desfachatez que no tiene límites» porque «se da por hecho que la responsabilidad ante un accidente es del ciudadano».
Para el PP, la instalación de estos carteles suponen el remate de una mala gestión de esta parte de la costa, en la que aún no está recomendado el baño después de que en abril se detectara un foco de contaminación fecal cuyas causas aún se están investigando.
Sin embargo, el concejal de Ciudad de Mar, José Eduardo Ramírez, aseguró que fue el PP el que hizo dejación de responsabilidades porque «el peligro no es nuevo» y el gobierno de Juan José Cardona, ni sus antecesores, «jamás pusieron una señalización de advertencia» del riesgo de derrumbe, «cuando se veían restos de caídas de piedras». Por eso, aconsejó al PP que fuera «más cauteloso» con sus críticas.
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