Torres: «Necesitamos urgentemente los test rápidos»

En una entrevista emitida por la Televisión Canaria, Torres insistió en que «el confinamiento es la mejor medida de prevención», señaló como «principal peligro» en materia de prevención «el tránsito de personas» y realizó un repaso de la situación de cada isla, destacando que Tenerife «es la más afectada» al tener «mayor número de casos y más personal sanitario contagiado».

«Tenerife necesita una actuación más determinante en estos momentos, mientras que Gran Canaria está mejor. En menor medida, están en La Palma, Fuerteventura y Lanzarote. Y en La Gomera y El Hierro la situación está más controlada», abundó.

En materia económica, habló de esfuerzos solidarios y colectivos para «una reconstrucción que no va a ser fácil».

«La gente debe saber que podemos vencer al coronavirus, un minúsculo virus que tiene en jaque a la sociedad. Hay que estar preparados para el día después. Pero, ¿quién es capaz de decir hasta qué punto nuestra economía quedará dañada? Eso exigirá medidas extraordinarias. Todos los recursos de las administraciones deben preservar los derechos sociales. No cabe escatimar un euro público para corregir este daño tremendo. Tendremos que tirar de liquidez propia y que vendrá de la Unión Europea, el Gobierno o en el endeudamiento. Incluso recurriendo a cambios de legislación si es necesario», argumentó.

«No puede quedarse atrás nadie. Lo público debe ser lo principal y destinar lo máximo para autónomos, pensionistas, personas con rentas bajas, parados...», insistió.

En relación con algunos sectores que siguen activos, como el de la construcción, el presidente del Ejecutivo razonó: «No podemos cerrar la economía para que la industria mínima pueda abastecer a los hogares. Hay que mantener esa actividad mínima».

Ángel Víctor Torres advirtió, en clave de futuro, que «el crecimiento será paulatino» y no «de manera inmediata» y deslizó que hay «promoción turística ya programada» para cuando se den las circunstancias adecuadas para retomar el pulso de la normalidad.

Además, el dirigente aplaudió la solidaridad del pueblo canario en estas fechas («hemos conseguido que muchas personas se apunten para ayudar en centros de salud») y fue claro al referirse al gremio sanitario («realizan una labor admirable y estamos en las mejores manos»), al tiempo que se comprometió a «dar respuesta a sus necesidades» cuando pase una crisis «que nunca antes se había dado».

En un mensaje dirigido a la población, aseveró: «No sé cuándo se va a acabar todo esto, pero sí sé que esto se va a acabar. Esto es un sufrimiento temporal. Igual que ya superamos situaciones muy complejas meses atrás, aquí también saldremos vencedores».

«Estoy durmiendo pocas horas y mal. Como todos. Por eso es básica la fortaleza mental. Tenemos que sonreír en casa para ayudarnos entre todos. A mi hijo ya le he explicado lo que es el coronavirus y que ahora no puede ver a sus amigos. Extremo precauciones en casa y sé que privo a los míos de momentos de ternura, pero es lo que debemos hacer. Nada será igual y el mundo cambiará, también sus realidades socioeconómicas. Quizás tengamos que humanizarnos más en el futuro. Y cuando esto pase, que podamos sentarnos en una mesa y contarle a nuestros hijos que vencimos y que estén con nosotros nuestros padres y nuestros abuelos», finalizó con hilo intimista.