Urbanismo gasta en La Cícer el millón que devolvió al Cabildo
El retraso en la redacción de la segunda fase del parque marítimo de Santa Catalina ha servido para que el área municipal de Urbanismo destine 1 millón de euros inicialmente previsto en esa obra a la pasarela del paseo de Las Canteras en la zona de La Cícer. En diciembre renunció a la aportación que el Cabildo tenía asignada por esa misma cantidad.
El plan de inversiones del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria para este año trasladará a la pasarela de La Cícer un millón de euros que se retiran de la segunda fase del parque marítimo de Santa Catalina. El informe técnico que justifica la operación expone que «todas las actuaciones preparatorias del contrato de obras» están ya concluidas, por lo que se está en condiciones de proceder «al inicio de su ejecución».
El coste total del proyecto requiere de 3,6 millones de euros, pero hasta el viernes no tenía los fondos necesarios para completar esa cuantía. Le faltaba el millón de euros que se le retiró en diciembre, cuando el Ayuntamiento optó por renunciar a la aportación comprometida por el Cabildo de Gran Canaria por esa cantidad, para financiar el plan de empleo social emprendido por la institución insular. Para el concejal del PP Ángel Sabroso, se trata de un ejemplo de «desidia», mientras el concejal de Urbanismo, Javier Doreste, cree que se trata de optimizar recursos. «Nos parece absurdo tener proyectos sin dinero, y a la vez tener dinero disponible sin proyectos», explicó en la última sesión plenaria, donde apuntó que «no renunciamos a ninguna cantidad de los convenios con el Cabildo».
Doreste justifica el movimiento de fondos porque la segunda fase del proyecto del parque marítimo de Santa Catalina aún no tiene el proyecto redactado, un encargo que debe realizar la empresa municipal Geursa. «A día de hoy, los trabajos preparatorios sólo han superado la fase de levantamiento topográficos y estudios geotécnicos, estimándose que se dispondrá de los proyectos de obra el próximo 20 de junio», relata el informe del jefe de servicio de Urbanismo. Sabroso apunta que ese retraso demuestra «el desinterés por los proyectos estratégicos» de la ciudad. Doreste mantiene que «no se renuncia a nada».