La población del Centro envejece
No sólo pierden población, sino que la que queda envejece. Artenara, Tejeda, Valleseco y Moya, municipios que iniciaron 2010 con menos vecinos que los que tenían al comenzar el año 2000, ven con el paso de los años como su pirámide poblacional engorda por arriba y adelgaza por abajo.
Artenara sumó a lo largo de todo el año pasado cuatro nacimientos, un 400% más que el año anterior, cuando sólo nació un bebé. En los tres últimos años son siete los nuevos vecinos venidos al mundo en el municipio menos poblado de la Isla. Y a la vez mientras que en 2005 eran 46 las personas que tenían entre 80 y 99 años, en 2010 el número de vecinos en esa banda de edad se había elevado a 88, casi el doble. Así, la pirámide poblacional de este municipio adelgaza por la base y engorda por la cúspide, una tendencia similar, aunque con cifras diferentes a la que experimentan los otros tres municipios grancanarios que iniciaron 2010 con menos vecinos que al comenzar el siglo XXI, Tejeda, Moya y Valleseco.
En Tejeda, a lo largo de los últimos seis años, la media de nacimientos es de nueve por año y en Valleseco la cifra ha bajado de 29 en 2007 a 25 en 2008 y a 16 en 2009 y en 2010. Tan pocos nacen que los dos ayuntamientos (gobernados por el PP) premian cada parto desde que empezó este mandato. En Tejeda con 1.500 euros por bebé, siempre que los padres estén empadronados y residan habitualmente en el municipio, y en Valleseco regalando un parque-cuna a los progenitores.
Si en 2005 el grupo de edad con más vecinos en Tejeda era el de quienes tenían entre 30 y 39 años, desde entonces el mayoritario es el que está en la cuarentena, seguido cada vez más de cerca por los que ya han cumplido medio siglo de vida. Ambos grupos suponen desde 2006 casi el 30% de la población.
