Borrar
Vea la portada de CANARIAS7 de este lunes 8 de diciembre de 2025

Deborah F. Rutter: «Nuestros músicos trabajan duro para ser los mejores»

Viernes, 10 de enero 2014, 00:00

P. ¿Qué fue lo que decidió a la Orquesta Sinfónica de Chicago a aceptar la invitación del Festival de Música de Canarias?

R. Este festival se encuentra en uno de los lugares más atractivos e inusuales que conozco, ¡las Islas Canarias! Nunca habíamos estado en este festival. Estamos muy contentos de poder venir y estrenarnos en el mismo, ya que nos permitirá conocer las islas, las sedes del Festival y a su público. ¡Hemos escuchado tantos superlativos sobre este festival que estamos encantados de asistir!.

P. ¿Ha sido importante a la hora de aceptar la invitación que Riccardo Muti haya estado varias veces en el mismo?

R. Sí. El maestro Muti nos habló sobre la importancia que le otorga al festival. Se aseguró de que la Orquesta Sinfónica de Chicago acudía al mismo con él.

P. La Sinfónica de Chicago está considerada como una de las mejores, si no la mejor, orquesta del mundo. ¿Qué la diferencia del resto?

R. -La Orquesta de Sinfónica de Chicago tiene el honor de ser considerada una de las mejores del mundo, porque cada músico trabaja muy duro para conseguir ser el mejor y que lo sea todo el conjunto. Es imposible comparar los aspectos concretos de una orquesta con otra, pero cada músico de la Sinfónica de Chicago es un virtuoso por derecho propio, y la combinación de cada uno los hace crecer. La Orquesta es extremadamente flexible, capaz de tocar cualquier repertorio y estilo con la aptitud, la delicadeza y el nivel más alto de interpretación artística que se requiera. Cada sección cuerdas, metales, vientos y percusión tienen un sonido distintivo y juntos crean uno que es realmente diferente. Los músicos tienen una relación realmente especial con el Maestro Riccardo Muti. Él los inspira y ellos responden a su liderazgo con delicadeza, fuerza y belleza.

P. ¿Le ha sorprendido lo que ha visto por internet de Canarias? Tengo entendido que algunos músicos de la orquesta han venido unos días antes de los conciertos a las islas para pasar sus vacaciones. ¿Es cierto?

R. Algunos de nuestros músicos han viajado antes para pasar unos días en su hermoso archipiélago, porque estaban muy atraídos y encantados por su belleza, así como por su reputación de turismo cultural, su deliciosa comida y, por supuesto, por su gran música.

P. A nivel económico, por la crisis actual, ¿cree que las orquestas europeas tienen mucho que aprender del modelo norteamericano?

R. Como gestores artísticos en América, nosotros hemos envidiado durante mucho tiempo el significativo apoyo de sus gobiernos a las artes, no sólo por la aportación de fondos, sino por su lucha para que la cultura sea importante en la vida de sus ciudadanos. Sin embargo, resulta cierto que una institución fuerte de cualquier tipo será mucho más estable cuando su sustento económico no depende de una sola fuente, sino de varias. Contar con el público y los patronos supone un apoyo fundamental y, además, sus contribuciones ayudan a que la institución esté mejor conectada con su propia comunidad. En cualquier caso, durante la crisis financiera, lo importante ha sido mantener la conexión con la comunidad.

P. En Europa, se asegura que el modelo de mecenazgo americano trae consigo para la música clásica un empobrecimiento del repertorio, porque sólo se programa lo que los mecenas quieren. ¿Comparte esta opinión?

R. Por supuesto que no. El patrocinio del que nos beneficiamos se sustenta sobre la premisa de que nuestros donantes creen en nuestra misión y en nuestro trabajo. Las donaciones van destinadas a los proyectos que nosotros perfilamos y para las declaraciones artísticas que determinan nuestros responsables musicales. Cuando un donante sugiere un repertorio concreto o se acerca a un proyecto, lo escuchamos con detenimiento, tal y como hacemos con las reacciones del público. Pero al final, la orquesta y quienes la dirigen eligen los principios artísticos y los proyectos pedagógicos para la comunidad que consideran más importantes.

P. ¿Interpreta la Orquesta Sinfónica de Chicago música contemporánea?

R. Sí. La Sinfónica de Chicago interpreta música contemporánea en sus distintos conciertos. Por ejemplo, cuando volvamos a Chicago en enero, interpretaremos piezas de Schubert y estrenaremos el Concierto para dos chelos y orquesta de Giovanni Sollima. La Orquesta, también, tocará por primera vez la obra Las voces del silencio, que compuso Ennio Morricone para conmemorar el 11 de septiembre de 2001. Fue interpretada por primera vez en Estados Unidos en la sede de las Naciones Unidas, en el año 2007. El maestro Muti había dirigido el estreno mundial de la misma en el Festival de Ravenna. La Orquesta Sinfónica de Chicago también tiene una serie especial, denominada Música Ahora (MusicNOW), que está coordinada por dos compositores contemporáneos tienen el título oficial de principales compositores en residencia, Mason Bates y Anna Clyne. En esta serie, nuestros músicos tocan sus composiciones y las de otros creadores actuales.

P. ¿Cuáles son las principales fuentes de financiación de la Orquesta?

R. Nuestra financiación es muy variada. Incluye, por supuesto, la venta de entradas, los alquileres de las instalaciones, los ingresos por las giras y la presencia, cada verano, en el festival de Ravinia, en unos suburbios del norte de Chicago. Y, por supuesto, nosotros contamos con contribuciones caritativas de distintas personas, empresas y fundaciones. Nosotros recibimos una pequeña aportación estatal, pero las principales aportaciones son privadas. Sus aportaciones cubren nuestras operaciones anuales y también nuestro fondo de dotación.

P. ¿Qué nos puede contar de los proyectos pedagógicos y sociales de la orquesta sinfónica que usted preside?

R. Estamos muy orgullosos de nuestros innovadores y variados programas educativos y sociales. Se incluyen programas específicos para jóvenes y familias, así como Érase una vez una sinfonía, que introduce a los niños en la música clásica. También contamos con programas y planes de estudio para profesores, a los que se los proporcionamos gratuitamente. Uno de éstos se llama Exploradores de Orquesta, que introduce a los jóvenes estudiantes en la música orquestal. También hay otro, llamado Sueño en voz alta, que anima a los jóvenes músicos para que sigan con sus estudios musicales y les motiva a la hora de afrontar sus desafíos. Otro proyecto es el de la Orquesta Cívica de Chicago, destinada a la formación de jóvenes adultos. Es la única de este tipo que está unida a una orquesta profesional norteamericana. La Orquesta Cívica, la Sinfónica y el Coro Sinfónico de Chicago también ofrecen programas gratuitos. El maestro Muti dirige a la Sinfónica de Chicago en una actuación gratuita cada año que disfrutan miles de personas. Además, permitimos que jóvenes, estudiantes y personas con ingresos muy bajos puedan acudir gratis a algunos ensayos de la Sinfónica. Queremos subrayar que todos estos programas los denominamos Maestría musical ciudadana la utilización del poder de la música para contribuir a nuestra cultura y a nuestras comunidades. Esta idea es muy importante para el maestro Muti, que nos dijo que uno de sus objetivos era hacer llegar la música clásica a la audiencia más amplia que sea posible. Por eso, el maestro designó al famoso violoncelista Yo Yo Ma como consultor creativo del proyecto. En Chicago, muchos de los músicos de la Sinfónica participan en este proyecto como parte de su trabajo, lo que les lleva a tocar en escuelas y hospitales. También protagonizan algunas actuaciones para recaudar fondos para actividades benéficas y solidarias. En las Islas Canarias, participaremos en unas clases magistrales en el Conservatorio y se ofrecerán unas actuaciones en centros sociosanitarios.

P. ¿Se ha reordenado el mundo de la música clásica por la crisis económica? ¿Es cierto que se han renegociado muchos cachés? ¿Considera que lo normal y aceptable es lo que se paga ahora y no lo que se pagaba antes?

R. Por la actual crisis económica, todas las organizaciones artísticas del mundo se han replanteado los caminos por los que transitaba su negocio, incluidos los pagos a los artistas y a sus trabajadores. Creo que esta situación puede ser muy productiva para nuestro negocio, porque ha obligado a un replanteamiento en las formas de gestionar nuestro tiempo, las finanzas y la industria de la música. Esta situación no es totalmente negativa, porque nos ha ayudado a plantearnos nuestras prioridades y nuestro desarrollo artístico. No hay negocio, ni parte de nuestra sociedad, que no se haya visto afectada por la crisis, por lo tanto no es irracional repensar algunos aspectos relativos a las operaciones financieras y a nuestra organización artística.

P. ¿Qué le ha llevado a aceptar el cargo de presidenta del Kennedy Center y abandonar la Sinfónica de Chicago?

R. Amo Chicago y la oportunidad de trabajar con el maestro Muti en la Orquesta Sinfónica de Chicago. La oportunidad de trabajar en la capital de Norteamérica, con un programa tan amplio y de tanto impacto como el del Kennedy Center es demasiado atractivo como para dejarlo pasar. Me gustaría transformar América con un proyecto que busca que el arte y la educación sean los pilares de su sociedad, y que subraya la importancia de la cultura en la historia de Estados Unidos.

Sigues a Victoriano Suárez Álamo. Gestiona tus autores en Mis intereses.

Contenido guardado. Encuéntralo en tu área personal.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

canarias7 Deborah F. Rutter: «Nuestros músicos trabajan duro para ser los mejores»

Deborah F. Rutter: «Nuestros músicos trabajan duro para ser los mejores»