La gente como Jonathan Viera no puede estar mucho tiempo sin acariciar un balón. Jony creció con uno pegado a sus pies. Maduraron juntos, quebrando en parques, goleando en campos de césped artificial y luego dominando en el verdadero verde, el natural. Debutó en la UD Las Palmas, donde estuvo hasta en tres etapas diferentes -no habrá cuarta como jugador-, y gobernó como amarillo. Probó fortuna en el Valencia, Rayo Vallecano, Standard Lieja, Beijing Guoan, Almería y Khor Fakkan.
En estos dos últimos equipos, Almería y Khor Fakkan de Emiratos Árabes, acabó tras un pleito con García Pimienta. Rescindió contrato con Las Palmas y se marchó al cuadro andaluz, donde se reencontró con Pepe Mel. Y tal vez no fuera su último reencuentro con uno de los entrenadores que ha tenido a lo largo de su carrera como futbolista.
Viera, que tuvo que dejar su experiencia en la UAE Pro League de Emiratos Árabes Unidos por motivos personales, no tiene en mente colgar las botas a corto plazo. Todo lo contrario. «Me desperté un día y eché de menos la pelota», confiesa el jugador que, a sus 34 años, todavía tiene cuerda para rato y calidad para seguir levantando a aficionados de sus asientos. Ofertas no le faltan.
Tiene varias ofertas
«Hay cosillas de Primera División, también de Segunda... pero todo apunta a que jugaré fuera de España, tengo que estudiarlo bien», añade Jonathan con los ojos iluminados bajo un sol abrasador en el López Socas, donde sacó, junto a Raúl Asencio, del Real Madrid, sonrisas a los niños y niñas presentes en el Campus José Ojeda.
Su teléfono ha sonado mucho estas navidades. Entre las posibilidades y ofrecimientos, la opción que más llama al propio Viera es la de un reencuentro con Quique Setién, que le entrenó en la UD Las Palmas y con quien siempre tuvo una relación especial. El técnico sacó brillo al mediapunta y el jugador mejoró también al entrenador.
El preparador cántabro, que puso rumbo a China para dirigir al Beijing Guoan, antiguo club de Jonathan Viera, quiere al grancanario de vuelta y ya ha habido contactos. «China es una posibilidad que me gusta», afirma el ex de la UD, que parece tener claro que su próximo destino estará muy lejos de España.
Asencio, saludando a los niños y niñas.
Cober
Ídolo en el López Socas junto a Raúl Asencio
Fue llegar al López Socas y copar todas las miradas de los niños y niñas que allí pulían su técnica. Foto por aquí, autógrafo por allí, todos venían a dar con su ídolo. Tampoco faltaron las charlas con conocidos, amigos y con Raúl Asencio, jugador del Real Madrid que debutó este mismo curso, que también exhibió humildad y cercanía con los más pequeños. «Cuando marques un gol, lo celebras así...», le dijo uno de los críos al central de Carlo Ancelotti. El joven zaguero, entre risas, le respondía que «goles iba a marcar poquitos». Viera se unía a la fiesta y, a carcajadas, decía:«A él pídele un corte, un buen corte». Los niños reían, miraban con admiración. Con esa sonrisa que solo la pureza de un niño puede albergar. Queriendo ser ellos algún día.
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