Sandro, ante el reto de volver a ser el que fue
Fútbol ·
Inicia su tercera temporada en la UD tras un curso pasado muy discreto (1 gol). Ahora está convencido de que vienen tiempos mejores
Un gol en toda la temporada pasada y habiendo sido uno de los jugadores más utilizados (27 partidos entre Liga y Copa para un total de 1.818 minutos), con derecho preferencial en la ejecución de acciones a balón parado, incluyendo penaltis. No vivió su mejor época Sandro instalado como referencia ofensiva indiscutible de la UD en una campaña 2024-25 en la que, como él es el primero en admitir, estuvo muy lejos de los parámetros realizadores esperados.
De hecho, fue uno de sus peores cursos en lo que atañe a la faceta realizadora además del ciclo 2017-19, en el que, entre Everton, Real Sociedad y Sevilla, 58 encuentros en total, únicamente sumó, como ahora se da el caso, una diana. Sin reproche alguno a su intensidad, profesionalidad y empeño, cualidades que nunca han dejado de caracterizarle, Sandro regresó a la UD para ser diferencial, más allá del mérito y del sudor.
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Además de la inversión que requirió su fichaje desde el Huesca, dos millones de euros en total entre una primera cesión y la posterior compra de sus derecho federativos, es uno de los jugadores mejor pagados de la plantilla.
De ahí que deba asumir, y así lo hace, la presión y la exigencia que le acompaña siempre. Sandro ha sabido digerir las críticas, se ha reseteado en vacaciones y encara lo que viene convencido de que su suerte va a cambiar.
Se siente valorado por los dirigentes, le han trasladado que Luis Carrión está encantado con tenerle en nómina y pese a la competencia añadida (Cédric o Mata ya son altas oficiales) más la que está por venir (interesan, otros otros, Romero y Boyé para el frente ofensivo) y acumula ilusiones y expectativas como nunca.
