«Santa Lucía informó en junio del cierre de la casa para víctimas de violencia machista»
El Cabildo aclara que baraja asumir la gestión de la residencia que dejó de gestionar el Ayuntamiento, pero que aún no está decidido
El Ayuntamiento de Santa Lucía de Tirajana cierra la casa de acogida para víctimas de violencia de género que llevaba funcionando más de 20 años en el municipio, y el Cabildo, tras esa decisión, estudia asumir su gestión. Así es como se han sucedido los hechos, según lo explica la consejera insular de Igualdad, Diversidad y Transparencia, Sara Ramírez, que ha salido al paso de la versión dada a este periódico por la edil de Igualdad, Minerva Pérez.
«El Cabildo se plantea asumir ese recurso no porque de repente haya decidido cambiar el modelo de gestión, sino como una consecuencia sobrevenida de una decisión que ha adoptado el Ayuntamiento de Santa Lucía y no la corporación grancanaria», matiza Ramírez. «Y esa decisión es cerrar la casa de acogida».
Aunque la competencia es del Cabildo y la financiación corría también por cuenta de la institución insular, el Ayuntamiento llevaba años asumiendo de forma directa la gestión directa de la casa, con personal municipal. Sin embargo, la consejera apunta que la corporación tirajanera les avisó este año de que no seguiría con el servicio. Les avisó unos meses antes, en torno a abril o mayo, de su intención de dejar de llevar de forma directa la gestión de esa casa de acogida, con capacidad para 14 usuarias.
Y añade la consejera que fue en junio cuando formalmente informó por escrito del cierre de la casa de acogida. «Nos trasladaron de forma oficial que dejarían de prestar el servicio a partir del 31 de julio de 2022». Ramírez no oculta el contratiempo que les supuso esa decisión. «Justo ahora estamos ultimando la apertura de otra casa de acogida también en Santa Lucía, así que cuando pensábamos que íbamos a tener tres operativas, de repente nos vemos otra vez con dos».
El PSOE apuntó un cierre
La explicación ofrecida por la consejera insular de Igualdad viene a confirmar la tesis del PSOE en Santa Lucía, en la oposición, que denunció que lo que se había producido con la casa de acogida no había sido producto de una decisión para cambiar el modelo de gestión del recurso, sino que es la consecuencia de un cierre unilateral del servicio.
Ramírez apunta que el Ayuntamiento justificó su decisión por dificultades para la contratación de personal. Lo cierto es que la casa estará inoperativa al menos hasta enero de 2023.
El Cabildo dice que su objetivo es reabrirla de la mano de una entidad social, pero que aún no está decidido. Y aclara que la segunda casa de este tipo, también en Santa Lucía, aún no está abierta. Confían en que lo esté para septiembre u octubre.