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Yesenia Martín Ramírez y / Las Palmas de Gran Canaria
Sábado, 17 de febrero 2018, 09:44
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Los primeros en subir al escenario fueron Los Nietos de Sary Mánchez, ganadores del concurso del año pasado, y tras ellos actuaron Los Twittys, Los Chacho Tú, Las Crazy Trotas, Los Chismosos, Los Trapasones, Los Serenquenquenes y Los Chancletas, que bajaron el telón.
Abriendo la final, unos Nietos de Sary Mánchez decididos a revalidar el título de 2017, pisaron las tablas de Santa Catalina convertidos en Cenicienta. «La Guaci» de Ciudad Jardín arrancó la sonrisa de los asistentes con su peculiar aventura en moto con su amiga «Yure».
Para perfeccionar la actuación, la llegada de Los Mamelucos al escenario puso en pie a una grada que no paró de aplaudir a los de Telde.
Los Twittys más críticos arrancaron con un particular Congreso en el que hicieron constar que Canarias es la gran olvidada de España. Los magos de Cinco Continentes, mantuvieron a un público expectante durante los últimos 15 minutos en el que no faltaron numerosos trucos del mago de antaño.
Arrebatados sobre el escenario, Los Chacho criticaron la situación de los trabajadores de Miguel Ángel Ramírez, sin olvidar a Puigdemont, Rajoy y el 155. Como cuñados de Pepe Martín completaron su actuación con humor e ironía con la compañía de Wendy, gran protagonista de la gala drag del año pasado.
Dar las campanadas en carnaval no es nada raro para las Crazy. El parque disfrutó de una noche de fin de año a su estilo en la que no faltó uvas, cotillón y crítica.
Como hermanas gemelas, aunque diferentes, la única murga femenina de la noche acabó su repertorio. Un tema divertido con un mensaje final claro, ¡Igualdad!
Con tarjeta roja en mano, Los Chismosos expulsaron sin tapujos a políticos y empresarios corruptos. Como obreros contaron a la afición cómo transcurre un día en la construcción. Una obra singular con mucha diversión.
Los testigos de Tomás Pérez juzgaron a Inmaculada Medina e Israel Reyes, en un tema en el que también se brindó homenaje a Jonathan Orozco, asesinado en el carnaval pasado.
Y como las ganas de ir al baño eran demasiadas, con váter y papel higiénico, Los Trapasones sorprendieron con una simpática puesta en escena en el que la suya, no era la única «’cagada’».
Un local con mucho ambiente, divertido y con una única intención, la de conseguir RESPETO. Los de Agüimes cantaron por la homosexualidad y la igualdad en su primer tema que dio paso a ángeles y demonios en la conciencia de un murguero. Una crítica sin censura en la que salieron a la luz ‘injusticias’ del pasado carnaval.
Los de La Isleta regresaron a su infancia con un cantajuegos que hizo bailar al público y al jurado. Su segundo tema, una propuesta divertida en el que disfrazados con peluca y una gran barriga, Los Chancletas más «gordos» pidieron acabar con el bullying.
El momento más esperado llegó tras el paso de las ocho murgas finalistas. El veredicto del jurado se hizo esperar en una noche en la que los nervios se palpaban pese a la actuación del grupo musical Nueva Fuerza. En torno a las 02.40 horas, Daniel Calero citó a los representantes de cada murga para leer el fallo de los jueces.
Primero se entregaron los premios de vestuario a las murgas Despistadas, Twittys y Nietos de Sary Mánchez. Luego llegaron los premios Criticón y Tomás Pérez que recayeron en las canciones La evolución de Los Nietos de Sary Mánchez y Un local con mucho ambiente de Los Serenquenquenes. Para finalizar, se entregaron los premios de interpretación en el que Los Serenquenquenes, Los Nietos de Sary Mánchez y Los Trapasones, recibieron el primer, segundo y tercer premio respectivamente.
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