

Secciones
Servicios
Destacamos
El Gobierno de Canarias no cederá la titularidad de la GC-110 pero finalmente está dispuesto a reconsiderar la conversión de esta vía en un bulevar con mayores zonas peatonales. El consejero de Obras Públicas, Sebastián Franquis, y el alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Augusto Hidalgo, anunciaron ayer el preacuerdo al que han llegado las dos administraciones para ampliar el espacio peatonal y crear un sendero ciclista en la subida de Tafira, sobre el barranco del Guiniguada.
Durante años, el Ayuntamiento intentó, sin éxito, municipalizar esta vía para favorecer la ansiada unión de los dos barrios históricos principales de la capital, Vegueta y Triana. Sin embargo, los reparos de los técnicos del Gobierno de Canarias habían bloqueado esta solución. Consideraban que esta arteria resultaba esencial como alternativa a un posible bloqueo de los túneles de San José.
Sin embargo ahora, gracias al proyecto de la MetroGuagua, se ha encontrado una posible solución que satisfaga a los técnicos de Obras Públicas. Al amparo de la obra de la MetroGuagua y de su implantación en Vegueta, se hace necesario ganar terrenos al mar entre Lady Harimaguada y el Guiniguada. En ese espacio en el que la ciudad se adentra en el océano, que tiene una superficie de 49.235 metros cuadrados, se incluye un cuarto carril de circulación para el coche privado.
Este cuarto carril permitiría solventar todos los reparos técnicos, según explicó Franquis. «Estamos en condiciones de acabar con la dudas técnicas de modo que en la próxima reunión podamos ceder esa parte de la GC-110 para que se convierta en un tramo urbano», aseguró el consejero de Obras Públicas.
El alcalde, por su parte, mostró su convencimiento de que la autorización a actuar en la subida de Tafira llegará este mismo año. La ventaja de este acuerdo es que la materialización de la unión de Vegueta y Triana no quedará condicionada a la obra del cuarto carril de la autovía -que aún está pendiente de la autorización de Costas-, sino que con la solución técnica que se incluye ahora en el proyecto de la MetroGuagua será suficiente.
Una vez que se tenga la autorización del proyecto por parte del Gobierno de Canarias, el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria buscará acomodo en sus presupuestos para iniciar la actuación en cuanto fuera posible.
La noticia fue dada a conocer ayer en el descanso de una reunión mantenida por los dos políticos socialistas para crear una comisión técnica, junto al Cabildo de Gran Canaria, que abordará los grandes proyectos en materia de carreteras, movilidad y vivienda que es necesario impulsar en la capital grancanaria.
El desbloqueo del proyecto de unión entre Vegueta y Triana requerirá, en todo caso, un plan de calmado de tráfico para una vía que, de acuerdo a los aforos municipales de 2016, utilizan a diario unos 15.000 vehículos.
De ellos, unos 11.400 bajan en dirección a la Avenida Marítima, mientras solo 3.900 suben hacia Tafira.
Debido a esta nivel de uso, los técnicos municipales habían propuesto la eliminación de la categoría de interés general de la vía para abrir la puerta al encuentro peatonal de las dos orillas del Guiniguada.
Las claves del proyecto de la unión entre Vegueta y Triana son:
Un carril de bajada. La principal transformación de la zona se producirá en sentido bajada. Los dos carriles para la circulación de vehículos se quedarán en uno, de forma que se amplían aceras y se construye un carril bici desde la zona del Rectorado de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. La calle Juan de Quesada se quedaría como un espacio rodonal de acceso exclusivo para vecinos, comerciantes y trabajadores.
Sin cambios en la subida. El proyecto en el que ha estado trabajando el Ayuntamiento desde 2016 mantiene los dos carriles actuales de subida hacia la zona de Tafira, pero para facilitar el tránsito peatonal entre Vegueta y Triana lo que se hace es poner toda la plataforma viaria al mismo nivel, tal y como se ha hecho en otros puntos de la ciudad, como es el caso de San Bernardo o de la nueva configuración de Fernando Guanarteme.
Aparcamientos disuasorios. Otra de las claves del calmado de tráfico que se quiere conseguir en la GC-110 y el fomento del uso del transporte público es la construcción de tres aparcamientos disuasorios en la zona. Uno estaría cerca del museo San Martín; otro estaría sobre el que tiene en estos momentos la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria; y el último se construiría en la zona de la calle Álamo.
En la reunión mantenida por el consejero de Obras Públicas, Sebastián Franquis, y el alcalde de la ciudad, Augusto Hidalgo, también se pusieron sobre la mesa otros asuntos. Los más importantes fueron los siguientes:
Belén María. El consejero de Obras Públicas del Gobierno de Canarias, Sebastián Franquis, anunció que en los primeros meses de 2020 se sacará a licitación la redacción del proyecto de soterramiento de la autovía a la altura de la rotonda de Belén María. Se ha escogido este proyecto «porque es el que tiene menos dificultades técnicas». Así, aunque el problema de tráfico en la zona se origina en el entrelazado de Alcaravaneras, Franquis considera que servirá para aliviar la congestión que se vive en determinadas horas. También lo estima el alcalde de la ciudad, Augusto Hidalgo.
Torre Las Palmas. Gobierno y Ayuntamiento acordaron someter la propuesta técnica que se dé a Torre Las Palmas a una consulta vecinal. La dificultad de la solución que allí se adopte -un entrelazado sin semáforos y sin un paso elevado- hace que las instituciones prefieran conocer la opinión de los ciudadanos en caso de que haya que comerse una parte de la playa de Las Alcaravaneras.
Circunvalación. Las propuestas de mejora de la GC-3, en especial las conexiones con Teror y el campus universitario, deberán convertirse en proyectos de obra y ejecución. «Los que presentó el anterior Gobierno durante la campaña electoral y de los que tuvimos noticia por los periódicos no lo son», aclaró el alcalde Hidalgo.
Metroguagua. El alcalde de la ciudad confía en poder iniciar el año que viene los rellenos necesarios para ganar terreno al mar en la zona de Vegueta con el fin de instalar la MetroGuagua. De hecho, no se descarta dividir la actuación en dos para agilizar la obra: por un lado el proyecto de rellenos y, por el otro, la creación de los carriles y la implantación de la MetroGuagua en el terreno ganado al mar. Augusto Hidalgo considera que el proyecto de la guagua exprés va en plazo pese a retrasos en algunos de sus tramos.
Las Rehoyas. También se confía en poder iniciar la reposición de las viviendas de Las Rehoyas el año próximo. La ciudad se sumará también al pacto por la vivienda pública.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.