El gas de la nevera y otros elementos que pueden desencadenar un incendio en casa

De todas las causas que se barajaban, una fuga de gas refrigerante en la parte trasera de la nevera no se encontraba entre las hipótesis más probables. «Cuando pensamos en un incendio en una vivienda, lo primero que se nos viene a la cabeza es un chispazo en algún punto del sistema eléctrico, una vela, un cigarrillo o incluso una cazuela olvidada mientras cocinamos. Lo último que pensamos es que un gas que lleva el frigorífico pueda ser el causante de un fuego en nuestra casa», reconoce Alejandro Ortuño, ingeniero técnico experto en extinción de incendios.

Sin embargo, un siniestro de estas características puede desencadenarse en los lugares y por los motivos más insospechados. Estos son algunos de ellos.

Mucho cuidado con los aparatos que llevan baterías de litio (móviles, patinetes eléctricos...) porque pueden incendirase durante la carga. Hace apenas un mes, siete dotaciones de los Bomberos de la Generalitat tuvieron que desplazarse hasta una vivienda de Girona para sofocar un incendio desatado en el interior de la casa al empezar a arder la batería de un patinete. Dos personas resultaron heridas.

«Lo primero que hay que entender es que una batería en frío no se incendia. Es decir, el punto crítico para que explote se produce normalmente durante la carga. Las celdas de iones de litio se sobrecalientan y arden. Pero también puede ocurrir que se incendie porque le han dado un golpe o las han manipulado», detalla Daniel Vique, ingeniero del departamento de Reconstrucción de Accidentes de Mapfre y profesor de la Universidad Europea.

¿Cómo se apaga? «Uno de los principales problemas de estas baterías es precisamente que no se pueden apagar con facilidad, una circunstancia especialmente peligrosa si prenden fuego dentro de una casa. Es imposible de extinguir solo con agua, así que lo más recomendable es aislar el aparato y esperar a que se consuman las llamas».

La combinación de materiales inflamables (las ramas artificiales, espumillones, bolas, figuritas...) con luces, enchufes y regletas por todas partes, además de la cantidad de velas que se suelen encender en esas fechas es una mezcla muy peligrosa. Los parques de Bomberos reciben muchos avisos durante las vacaciones navideñas por pequeños fuegos desatados en los salones como consecuencia de la decoración navideña. «Además de la parte obvia de no encender velas cerca de textiles o materiales que puedan arder con facilidad, es importante revisar las luces, regletas y, sobre todo, no hacer chapuzas tipo empalmes si no se sabe», coinciden los expertos.

¿Cómo se apaga? «Para poder sofocar este tipo de incendios caseros es aconsejable tener un pequeño extintor en la vivienda. El modelo más extendido es el conocido como extintor de polvo polivalente ABC porque es el que sirve para más tipos de fuego: madera, tela, plástico, gasolina, pinturas, petróleo, butano, propano, metano...

Un mal mantenimiento de los electrodomésticos es otra de las causas que está detrás de más incendios en los hogares. Y uno de los grandes olvidados en este sentido es la campana extractora. No solo hay que limpiar los filtros para evitar que se acumule grasa y se desate un fuego sino que en determinados modelos es obligatorio cambiarlos cada cierto tiempo.

«Pasa algo parecido con las calderas. Dependiendo del combustible (gas natural, propano...) tienen una indicaciones de ventilación, revisiones y mantenimiento que se deben cumplir para evitar sustos», insiste Alejandro Ortuño.

¿Cómo se apaga? «Para sofocar el típico incendio que se desata por una sartén al fuego, se recomienda usar un aparato del grupo F porque su agente extintor está especialmente preparado para acabar con las llamas causadas por la utilización de aceites y grasas que se usan en las cocinas. «Al no tener polvo, no se pierde la visibilidad en ningún momento ni produce riesgo de asfixia en lugares cerrados».