Las otras causas pendientes del rey emérito
Mateo Balín / Madrid
Corinna Larsen. Su nombre, anteponiendo el título de princesa, comenzó a hacerse coloquial en España en abril de 2012, tras el ‘tropiezo’ de don Juan Carlos en Botsuana. Aquel incidente no solo marcó un antes y un después, no solo sacó a la luz los trapos más oscuros del considerado, hasta ese momento, un rey ejemplar. También le señaló la puerta de salida. Con su abdicación en junio de 2014, tras 39 años en el trono, lejos de alejarse los nubarrones, se provocó la tormenta perfecta.