Luz verde al regreso de los vecinos

Las familias que permanecen desalojadas tras la explosión y posterior incendio de una casa en el casco de Agüimes, podrán volver hoy a sus viviendas. Los técnicos descartan en su informe provisional que la estructura esté dañada y apunta a la acumulación de hidrocarburos como causante de la explosión.

Jueves, 1 de enero 1970 | Actualizado 21/07/2020 15:29h.

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Los efectivos que continuaron durante toda la jornada de ayer retirando escombros, tanto del interior de la vivienda de la tercera planta, como del exterior del edificio no encontraron restos de ninguna bombona de butano. La hipótesis principal que barajan los investigadores es que el incendio y la explosión, que se llevó por delante la mitad de la techumbre que salió despedida por los aires y gran parte de los muros de contención, fue por una acumulación de hidrocarburos en el interior de la vivienda, principalmente por el uso de gasolina como combustible. Una única chispa puede hacer detonar todo el gas acumulado en el interior, como así parece que sucedió. Una vez que se evapora la gasolina actúa casi como el butano, de ahí la brutalidad de los desperfectos ocasionados en la vivienda. La onda expansiva fue lo que pudo causar el derrumbe de casi toda la fachada de la vivienda y de la mitad del techo que desapareció. Por suerte, la explosión y el incendio no arrasó por completo la techumbre de la tercera planta ya que si se hubiese derrumbado por completo podría haberse llevado por delante los muros y el pilar de carga provocando el colapso total del inmueble ubicado en pleno casco de Agüimes.

La primera evaluación del estado del edificio ubicado en el número 12 de la calle Alonso Quesada en Agüimes, y que fue objeto de la explosión y posterior incendio intencionado en la tercera planta, no apreció daños estructurales en el edificio, según confirmaron fuentes del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria y de los técnicos encargados de evaluar en la mañana de ayer la situación del inmueble.

El edificio está en ruinas parcial y tendrá que emprender un proceso de remodelación y rehabilitación pero sin necesidad de mantener a las familias desalojadas por más tiempo. Ahora será el ayuntamiento de Agüimes el que tenga que dar el visto bueno para comenzar la rehabilitación y reparación del daño, así como la demolición de lo que queda en pie de la tercera planta que voló como consecuencia de la onda expansiva en la tarde del pasado martes.

Las cinco familias que ayer permanecían desalojadas, tres de ellas en un hotel del municipio y las otras dos en segundas viviendas en la costa, podrán volver hoy a sus domicilios con totales garantías de seguridad, según confirmaron desde el consistorio. De los bloques contiguos al afectado, solo hay una vivienda que cuenta con daños en una de las habitación que daba directamente a la casa que saltó por los aires. Unos daños que son compatibles con el regreso de sus moradores. Durante la jornada de ayer bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria seguían trabajando en la zona, retirando escombros y facilitando el acceso de los vecinos de las dos plantas inferiores al interior de sus casas para recoger algunos enseres y efectos personales.

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