Así son los cuatro proyectos para presidir la Audiencia Provincial

Pero Pilar Parejo fue mas allá y dijo que el Albagate había generado «descrédito y desconfianza» sobre este órgano y afirmó que su objetivo era «pasar página y trabajar con ilusión y transparencia en recobrar la confianza de la ciudadanía en la Audiencia Provincial».

Por su parte, Carla Vallejo insistió en que hay que «dar un nuevo impulso a la Audiencia Provincial ya que a nadie se le escapa que hemos sufrido tensiones importantes» y se han publicado «noticias en los medios que han dañado la imagen de la Justicia. Tenemos que reaccionar y que el presidente asuma la defensa pública de la justicia en Canarias y de sus jueces y juezas. No puede ser que la imagen que se ha trasladado a la ciudadanía sea la que ha sido, es necesario contrarrestar esos mensajes con liderazgo, comunicación y transparencia», dijo al CGPJ.

Por último, Cobo Plana eludió el Albagate y se centró en potencial la unificación de doctrinas tanto en la Audiencia como en Primera Instancia.

Ahora toca que el CGPJ dedica el ganador de este castin.

Comparte la idea de fortalecer la colaboración con el TSJC, decanos, abogados, procuradores... pero su idea dice que «va más allá». La función del presidente, sostiene, «es más que lo que se hace ahora que es regular las vacaciones, las sustituciones, hacer juntas para unificar doctrinas, que nosotros no hemos tenido...». Su idea es la unificación de la doctrina en las salas penales y, especialmente, en las civiles. ¿Cómo? Estableciendo una base de datos en la que él mismo recogerá la jurisprudencia de todos sus compañeros y la sistematizará de tal manera que puedan acceder a ella todos los jueces de la provincia en su día a día. La consecuencia con este sistema sería averiguar en qué sentencias entran en contradicción y, de esa manera, «promover la manera de hacerles ver las mismas y que eso no vuelva a ocurrir», dijo. También quiere que los jueces de Primera Instancia, cuando hayan asuntos novedosos, se lo comuniquen e introduzcan las sentencias en esa base de datos. Se mejoraría «la comunicación y coordinación de la doctrina de la Audiencia Provincial por parte de sus magistrados y los de Primera Instancia».

Ya fue presidenta y se vuelve a presentar para «pasar página» con el Albagate y «trabajar con ilusión y transparencia en recobrar la confianza de la ciudadanía en la Audiencia Provincial». Ha propuesto representar institucionalmente a la Audiencia Provincial y cumplir con su gestión y buen funcionamiento, apoyar de manera decidida la instauración del expediente digital, potenciar la coordinación, colaboración y entendimiento de todos los colectivos que trabajan en la Administración de Justicia, mejorar el auxilio internacional, habilitar salas de espera para los testigos no sean vistos por el público, coordinar con el decanato el uso de la sala Gesel, acordar con la Fiscalía Provincial el tener conocimiento si hay acuerdos que faciliten sentencias de conformidad para evitar que los testigos y peritos no pierdan la mañana en el juzgado, resolver las quejas de los ciudadanos con rapidez y eficacia, potenciar la mediación intrajudicial, apostar por el compromiso con la violencia de género, acercar la Audiencia a los ciudadanos, cambiar el sistema de sustituciones voluntarias y unificar criterios en las prácticas procesales, entre otras.

Aspira a la reelección y mantiene la idea de que su programa gire en torno a tres ejes: humanizar la Justicia, la unificación de criterios y el uso de las nuevas tecnologías de información y comunicación (NTIC). En cuanto a humanizar la justicia, destaca el acercarla al ciudadano celebrando juicios en Lanzarote y Fuerteventura y mejorar el trato dispensado con una justicia atenta y clara. Además, tiene como objetivo la creación de la comisión de coordinación provincial en materia de violencia de Género. En cuanto a la unificación de criterios, dijo que solo se consiguen «con reuniones y más reuniones, a nivel general y sectorial con decanos y jueces de todos los partidos judiciales, con comisiones, directores de los centros penitenciarios, responsables de seguridad, fiscales y abogados». En el aspecto tecnológico, prometió estar especialmente vigilante ante el expediente digital que se avecina. Por último, dijo que en la Audiencia Provincial las secciones penales están «razonablemente bien» y en las civiles «se han pedido comisiones de servicio y, si no hay continuidad, se complicará mucho la situación actual».

Quiere dar un vuelco en la Audiencia Provincial porque «no puede ser que la imagen que se ha trasladado a la ciudadanía sea la que ha sido, es necesario contrarrestar esos mensajes con liderazgo, comunicación y transparencia». Apuesta por fortalecer las relaciones entre los jueces trasladándose a todos los partidos judiciales para que les transmitan sus necesidades. También quiere que las secciones celebren juicios en las islas y generalizar la celebración de plenos jurisdiccionales y no jurisdiccionales. Insiste en tratar la unificación de criterios y de prácticas procesales, determinar cómo comunicar y de qué manera las resoluciones de carácter público, clarificar las sustituciones voluntarias y dotar a las secciones Cuarta y Quinta de un nuevo magistrado como tiene la Tercera y, hasta que eso no ocurra, hacerlo con sustituciones voluntarias o con comisiones de servicio. En el ámbito penal, promover unas normas de reparto eficientes que garanticen la imparcialidad objetiva y en cuanto a Oficina Judicial y la modernización de la Justicia, establecer mecanismos de mejora en la Audiencia Provincial sin la necesidad de grandes innovaciones.