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El director de Yrichen, Juanjo Pérez, en la sede de CANARIAS7. Juan Carlos Alonso

Entrevista a Juanjo Pérez

«El mundo de las adicciones está en constante movimiento y con nuevas problemáticas»

El presidente de la Asociación de Entidades Canarias de Adicciones alerta de que la desinformación del presente abona el terreno para los malos hábitos del futuro

Carmen Delia Aranda

Las Palmas de Gran Canaria

Domingo, 25 de agosto 2024, 02:00

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Juanjo Pérez representa quienes se enfrentan día a día con los estragos de las adicciones. Firme y sereno, el presidente de la Asociación de Adicciones Canarias de Adicciones (AECA) da voz a una decena de organizaciones que sacan del hoyo a quienes entran en un bucle adictivo. El desconocimiento social de estos problemas abona el futuro a nuevos problemas.

- La asociación que usted preside ha denunciado que las adicciones han caído en el olvido, ¿en qué se basan para realizar esta afirmación?

- Es más una propuesta que una denuncia en la que apelamos a la responsabilidad compartida de toda sociedad, no solo de las entidades públicas, sino de las propias ONG, del sector empresarial y del conjunto de la sociedad. Entendemos que hay una bajada de la percepción del riesgo en el conjunto de ciudadanía de las problemáticas de adicción respecto a la que había hace 20 años. Eso se traduce en una menor inversión en políticas de prevención y en una menor conciencia ciudadana que va aparejada a las problemáticas que se desarrollen en el futuro. Lo que proponemos es hacer una inversión y recuperar el espíritu que hubo en los años 90 en Canarias y en el conjunto del Estado de apoyar y entender que esto debe ser prioritario desde el punto de vista educativo. También debe ser prioritaria la intervención y el tratamiento de las adicciones. Nos basamos en las personas con las que trabajamos y las problemáticas graves que atendemos e, incluso, en los programas de prevención en los que trabajamos, ya que en muchos de ellos detectamos que hay un tremendo desconocimiento de algunos riesgos asociados a sustancias y ciertos comportamientos.

- Parece que ciertos consumos se han normalizado. Sorprende saber que el 19% de los conductores accidentados en Canarias había consumido cocaína.

- Sí. ¿La percepción de riesgo hace 20 o 25 años era mayor? Sí. ¿Por qué? Pues porque, cuando apareció la heroína, en los años 80 y 90, fue tan grande shock que el shock que se generó una conciencia de prevención. Teníamos miedo, información o precaución. Lo teníamos de serie por lo que veías en tu día a día en la calle. Eso no desapareció, esa realidad sigue ahí. Lo que pasa es que se desarrollaron programas de atención, como los que hacemos en Yrichen y en las entidades de la AECA, que, en cierta manera, ocultaron un poco esa realidad. La sacaron del foco de las calles, pero las problemáticas siguieron existiendo.

- Y ahora, ¿qué pasa?

- Creo que se ha complicado por varios factores. ¿Cuáles podríamos destacar? Primero, la inversión porcentual en programas de prevención ha bajado y eso ha provocado que esa percepción de riesgo también caiga, sobre todo entre gente más joven que desconoce lo que supuso la epidemia de heroína o lo que suponen los efectos perniciosos de drogas duras o de la adicción al juego. Por ejemplo, una de las cosas más preocupantes del estudio Edades es el porcentaje de personas de entre 14 y 18 años que declaran haber consumido hipnosedantes en los últimos meses; más del 10%. No es ninguna tontería. Estamos hablando del uso normalizado de ciertos fármacos en un porcentaje no desdeñable de población muy joven. Y eso es lo que luego vemos en población adulta que llega a tratamientos con problemáticas de adicción graves. Hay menos información y por lo tanto es normal que las problemáticas que pueden sucederse luego sean graves.

- Pero una cosa es que la percepción de riesgo baje en la población y otra que esto se refleje en las actuaciones de las administraciones públicas.

- Seguramente la percepción de riesgo ha bajado porque la inversión de las entidades del conjunto estatal, autonómico, insulares y locales ha ido bajando también. Es decir, una cosa ha provocado la otra y no al revés. Antes había una mayor inversión en campañas de prevención. Ahora, proporcionalmente, son menores, habiendo las mismas o más problemáticas o riesgos. Por resumirlo, la bajada de la percepción de riesgo es más una consecuencia de que ya para las entidades públicas y en el conjunto de la sociedad no ha sido una prioridad prevenir esto.

- No es una prioridad pero el último año aumentó un 13% el número de personas que reciben tratamiento en las asociaciones canarias de adicciones.

- Atendemos a más gente con los mismos recursos o con muy pocos recursos más. La atención que vamos a poder prestar, si sigue aumentando la demanda, será peor. La subida de personas en tratamiento, es decir, cuando ya tienen un problema y tocan a la puerta, es por varios factores. Entre ellos está en que hemos hecho un esfuerzo también por hacer también sensibilización y por explicar a la gente que si tiene una problemática puede acudir a un recurso asistencial. Pero también hay otros factores como el hecho de que el mundo de las drogas o de las adicciones está en constante movimiento y cada vez aparecen más problemáticas

- ¿Cómo cuáles?

- El abuso de psicofármacos o las problemáticas vinculadas a adicciones comportamentales, muy relacionadas con las nuevas tecnologías, pues no existían de esta manera hace 15 o 20 años. Y esas personas tocan a la misma puerta; las entidades que trabajan en tratamiento de adicciones. Ante eso podemos desarrollar programas innovadores o colaborar con la administración haciendo cosas nuevas, pero es normal que, al final, los problemas o las personas en tratamiento aumenten, porque los retos que afrontamos también van cambiando, evolucionando y son cada vez más complejos.

- ¿Se ha dado algún paso para redactar el nuevo Plan Canario de Adicciones?

- Celebramos y valoramos positivamente que este gobierno autónomo haya impulsado la creación de una nueva Dirección General de Salud Mental y Adicciones,. Ya empiezan a tener una propia entidad, como la tuvieron en su día con la Dirección General de Drogodependencias, y además hay otra buena noticia: que se uniera todo el trabajo en adicciones con la salud mental porque al final no se podían disociar.

- Pero el plan actual tiene vigor hasta final de este año.

- Hemos tendido la mano al gobierno para que en el nuevo Plan de Adicciones se tenga en cuenta una serie de propuestas hechas desde la experiencia en el terreno. Nos preocupa que se retrase, pero entendemos que es un problema que incluso trasciende a esta Consejería y al gobierno, que es un problema general de las administraciones. La maraña administrativa y burocrática de las entidades públicas en su conjunto está afectando a la resolución de problemáticas sociales.

- ¿Y hay suficientes datos canarios sobre las adicciones?

- No, informes como el Edades o Estudes son radiografías nacionales con una parte de la muestra a nivel autonómico. Creemos que hay fondos europeos y hay capacidad en Canarias de las entidades públicas, las organizaciones sin ánimo de lucro y las universidades, por ejemplo, para hacer una investigación más profunda y ver si hay fenómenos o factores que se nos escapan.

- ¿Qué consumen quienes buscan ayuda en las ONG canarias?

- La principal sustancia de consumo en las personas que están en tratamiento son la heroína (30%), la cocaína (23%), el alcohol (16%) y el cannabis (13%). El alcohol tiene unos factores a destacar. Es la sustancia más asociada al policonsumo. Es decir, buena parte de quienes tienen problemas de abuso de benzodiazepinas o de cannabis, además, bebe.

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