Los perros, los otros 'psiquiatras' de los adolescentes

El proyecto, que empezó a mediados de septiembre y se ha prolongado hasta diciembre dado su éxito, está dirigido a adolescentes ingresados en la unidad Infanto-Juvenil de Psiquiatría del 12 de Octubre. La iniciativa permite que los perros, específicamente entrenados y seleccionados, participen en las actividades dirigidas a la recuperación de estos pacientes, bajo la supervisión del equipo de profesionales del hospital, junto a los guías caninos y psicólogos especializados.

Inspiradog, según destacan los centros involucrados, es un programa terapéutico y de investigación que tiene como objetivo mejorar la calidad de la atención que reciben estos pacientes, mediante el alivio de la sensación de aislamiento que muchos de ellos presentan, así como contribuir a la resolución de sus problemas emocionales y sociales. «Este proyecto servirá de ayuda para la asimilación de aprendizajes de vida de estos niños y adolescentes, mediante una mejora emocional y para la creación de expectativas y alternativas educativas y laborales positivas asociadas al mundo del perro», señalan.

Para ello, se trabajará en la vinculación de los pacientes al programa, mediante una primera conexión con el animal, así como en el fomento del trabajo grupal en el ámbito de las emociones, abordando temas como la creación de relaciones, el autocuidado, la impulsividad y autocontrol, la autoestima, la tolerancia a la frustración, la reducción del estrés y la ansiedad, y la vuelta a la calma, entre otros.

El programa constará de una actividad grupal en dos sesiones semanales de una hora cada una, desarrolladas hasta diciembre. Los pacientes se dividirán en dos grupos de entre 8 y 10 usuarios, con un rango de edad situado entre los 12 y 18 años, con el fin de adaptarse a los ingresos y altas hospitalarias.

Inspiradog es el segundo proyecto conjunto de la Cátedra Animales y Sociedad y el Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid, ya que, desde el año 2019, ambas instituciones trabajan conjuntamente en Huellas de Colores, el primer programa de actividades terapéuticas en el que se incorporan las Intervenciones Asistidas con perros en una UCI pediátrica.

Esta iniciativa, pionera en las unidades de cuidados intensivos pediátricos de España, ha demostrado que este apoyo al tratamiento clínico disminuye significativamente los niveles de dolor, miedo y ansiedad de los menores que han sido intervenidos quirúrgicamente debido a las experiencias emocionalmente positivas que generan estos animales.

Dirigida por la doctora Nuria Máximo Bocanegra, la Cátedra de Investigación Animales y Sociedad es la primera de estas características en una universidad pública española (en este caso la Rey Juan Carlos). Nació en 2016 para investigar, formar y difundir los efectos de la vinculación entre el ser humano y los animales.