Los gases tóxicos obligan a confinar durante horas a 33.000 personas en el Valle de Aridane
Este lunes se alcanzaron los mayores niveles de dióxido de azufre en el aire. La colada sur arrasa casas en Las Norias. La ceniza afectará hoy al aeropuerto
Pese a que presenta menos actividad que hace un mes, el volcán sin nombre de La Palma sigue dando guerra a la población del Valle de Aridane, que ayer por la mañana tuvo que confinarse durante unas cuatro horas ante la intensa presencia del dióxido de azufre (SO2) en los municipios de El Paso, Los Llanos y Tazacorte.
La decisión de ordenar el confinamiento de las 33.000 personas que viven en el Valle se adoptó sobre las 9 de la mañana, tras declarar la calidad del aire extremadamente desfavorable por la superación de los límites permitidos de SO2. De hecho, ayer, a las 9.00 horas en El Paso, se registraron los mayores valores de dióxido de azufre hasta el momento, con un promedio horario de 2.593 microgramos por metro cúbico. Una cantidad que dobla la concentración máxima por la que se califica la calidad del aire como extremadamente desfavorable, es decir, que puede afectar «gravemente» la salud de la población entera. Además, la presencia de dióxido de azufre se apreció incluso en la vertiente este de la isla, en concreto en la estación de El Pilar en Santa Cruz de La Palma.
Por ello, hasta las 13.00 horas, cuando se levantó el confinamiento por la disminución de este gas tóxico, se pidió a la población del Valle que permaneciera en espacios cerrados, que evitara salir en coche y que el alumnado se quedara en las aulas mientras durara esta situación.
«Cuando se ha decretado el confinamiento es porque las personas dentro de sus viviendas, con puertas y ventanas cerradas, no corren ningún riesgo; si hubiera habido peligro para la salud, se habría tomado otra decisión, no la del confinamiento», recalcó ayer el portavoz del comité técnico del Plan de Emergencia Volcánica de Canarias (Pevolca), Miguel Ángel Morcuende, que señaló que las clases se mantendrán mientras la calidad del aire sea aceptable.
Con la reactivación de la actividad explosiva del volcán del domingo, la columna eruptiva llegó a alcanzar los 6.000 metros y hubo momentos, sobre todo a las 12.00 y 17.30 horas, en los que emitió abundante ceniza y bombas que lanzó a distancias de hasta 500 metros del centro emisor. Ayer el penacho midió 4.200 metros y hoy se prevé que el viento lo traslade hacia el noreste, lo que podría afectar a la operatividad del aeropuerto de La Palma, según precisó la portavoz científica del Pevolca, María José Blanco.
Esta violenta actividad se ha traducido en nuevos derrumbes en el cono principal del volcán, que han agrandado el cráter superior y el cono secundario, señaló Blanco.
La colada que recibe el mayor aporte de lava es la situada más al sur, que está ensanchándose en la zona urbana de Las Norias destrozando nuevas viviendas.
