«El desarrollo sostenible obliga a una estrategia social, económica y medioambiental»
Canarias7.
Jueves, 31 de marzo 2022, 02:00
-¿Cuál es el origen y propósito de una compañía como BLUE EARTH?
-Nuestra organización, Blue Earth, nace en 2021 en el seno de un sistema de empresas ubicadas en Canarias y pertenecientes todas ellas al sector del desarrollo sostenible, la gestión de residuos y el medioambiente, por lo tanto, nuestro ADN corporativo está claramente definido por esta identidad.
En esencia, somos una consultora empresarial especializada en proporcionar a nuestros clientes, tanto del sector público como privado, soluciones en materia de desarrollo organizacional, desarrollo de negocio, así como en materia de formación y desarrollo de recursos humanos.
Dicho esto, tenemos perfectamente asumido e integrado nuestro propósito particular como empresa, y este no es otro que contribuir a través de nuestras actividades al desarrollo sostenible de nuestro entorno, entendiendo el mismo como el ecosistema social, económico y medioambiental que nos rodea. De hecho, estos tres conceptos: el social, el económico y el medioambiental, suponen los tres ejes de referencia a la hora de diseñar cualquier estrategia de desarrollo sostenible.
-En el ámbito del desarrollo de Recursos Humanos, ¿qué proyectos, iniciativas o soluciones de esta naturaleza se están llevando a cabo desde BLUE EARTH?
-Fundamentalmente centramos nuestra propuesta de valor en ayudar y dar soporte a nuestros clientes a la hora de dar cobertura a las necesidades de desarrollo de su organización, todo ello a través de un adecuado proceso de diagnóstico, evaluación precisa del perfil del capital humano y los recursos disponibles, el diseño de las acciones , herramientas y soluciones más eficaces para dar cobertura a dichas necesidades y, por supuesto, el alineamiento de todo ello con los objetivos, misión y propósito de la organización.
A priori resulta sencillo de definir, pero altamente complejo a la hora de implementar.
-¿Cuáles son los principales retos y desafíos que una organización afronta actualmente a la hora desarrollarse para ser más competitiva?
-Sabemos que en el Siglo XXI las organizaciones, tanto empresas como instituciones públicas, se enfrentan a un entorno altamente competitivo en el que los retos a superar poseen un perfil híbrido: medios de comunicación, redes sociales, clientes y consumidores físicos, legislación y entorno regulador, competencia interna y externa ...
La estrategia de las organizaciones, y sus posibilidades de éxito en la actualidad, dependen cada vez más, de estar dotadas de una estructura humana adecuadamente formada, y dotada de las competencias, las habilidades, los conocimientos y las destrezas necesarios para aportar los niveles de calidad, eficacia y eficiencia que se requieren.
En este punto, es esencial señalar una idea clave: el ámbito del desarrollo de los recursos humanos de las organizaciones, posee un carácter intangible, a la par que posee un enorme valor y capacidad de influir sobre los resultados. En ese ámbito de la intangibilidad, resulta estratégico que las personas que forman parte de las empresas e instituciones estén dotadas de la capacidad de ser lo más transversales posibles en lo que al desempeño de sus funciones se refiere. Esto supone estar en posesión de un conjunto cada vez más amplio de conocimientos, habilidades, competencias y destrezas, las cuales les permitan aportar mayor valor en ámbitos y terrenos cada vez más variados desde su puesto de trabajo; en contraposición todo ello, casi de forma anticíclica, con la tendencia altamente orientada a la especialización que la formación y capacitación ha tenido en los últimos 100 años.
Por tanto, el gran reto de la formación y el desarrollo de personas en la actualidad es saber conjugar la dotación de contenidos concretos y especializados, con la perspectiva cada vez más amplia y transversal que se exige al trabajador del siglo XXI para ser competitivo.
-Ha mencionado usted la actividad formativa como uno de los pilares del desarrollo de las personas en las organizaciones, ¿a qué retos se enfrenta a la hora de cumplir con ese objetivo?
-La formación, como concepto, no se ciñe a la mera transmisión de información. Se trata de un proceso de transferencia de conocimientos que, acompañado de una metodología adecuada, permite desarrollar a la propia persona en sí misma, mejorando sus capacidades, competencias, habilidades, e incluso sus conductas y actitudes. Todo ello conducente a obtener un mejor resultado en algún ámbito o aspecto determinado.
Si hablamos de la formación que se desarrolla en el seno de organizaciones, podríamos hablar de 3 elementos fundamentales a la hora de orientar hacia el éxito los procesos de desarrollo y formativos.
En primer lugar debe existir un claro alineamiento entre la formación y capacitación de la cual se dote al capital humano de una empresa, y los objetivos, metas y propósito de la misma. Esto, aunque a priori resulte de sentido común, en no pocas ocasiones no se cumple, fundamentalmente debido a una ausencia de planificación y de organización. Por ello, todo el proceso ha de pasar, inherentemente, por una evaluación y diagnóstico efectivos. Saber dónde estamos y qué necesitamos para llegar a donde queremos ir.
En segundo lugar, debe trabajarse la formación y desarrollo en varios niveles: los transversales y necesarios para funcionar de forma efectiva como organización, los grupales para lograr el mejor desempeño de los equipos, y los individuales que permitirán que la experiencia entre el individuo y la organización de los mejores frutos para ambas partes.
En tercer lugar, se debe hacer un uso de las herramientas formativas más adecuadas y que garanticen la mejor asimilación en integración de los contenidos. Afortunadamente, los avances en metodologías didácticas y el soporte que ofrecen las infraestructuras digitales en la actualidad, están logrando importantes resultados y equilibrio en el saber - hacer.
-¿ En una región, país y entorno internacional que se enfrentan en la actualidad a alguno de los desafíos, sociales, políticos y económicos más importantes de su historia , qué papel juega la formación para el futuro profesional de nuestros jóvenes y que oportunidades podemos vislumbrar?
-Se trata esta de una cuestión de gran importancia. Al hablar de formación, desarrollo y capacitación de nuestros jóvenes, no sólo estamos hablando de sus posibilidades y oportunidades de inserción laboral. Estamos hablando realmente de la situación que nuestro activo más importante tendrá en el balance que, como país, poseamos a la hora de competir globalmente.
En este sentido, la contribución que cada uno de nosotros individualmente haga al valor total de nuestras organizaciones, medido ello en términos sociales, económicos y medioambientales, deberá ser la mayor posible.
Es por esto que, modelos como el de la formación dual, en alternancia con la experiencia laboral práctica, o la mejora continua de la formación profesional, suponen una de las vías de desarrollo más interesantes a la hora de mejorar la estructura laboral, no sólo a nivel nacional, sino muy especialmente en nuestra región. Permiten la incorporación de personal al mercado laboral con un nivel de habilidades, destrezas y conocimientos altamente alineados con las necesidades reales del mercado, así como una curva de adaptación / productividad de la persona en su puesto de trabajo lo más vertical posible.
Frente a todo ello, el más grande de los retos a los que nos enfrentamos en la actualidad viene de la mano de los elementos que, a nivel internacional, están reconfigurando la realidad política, económica y sanitaria que nos rodea. La afectación que todo ello tenga sobre los recursos y las estructuras formativas de las que disponemos actualmente, determinará el futuro.