¿Cómo conservar los idiomas en un cerebro políglota cuando se opera un tumor?
sanidad ·
Jesús Martín-Fernández es neurocirujano del Hospital Universitario de Nuestra Señora de La Candelaria, en Tenerifeefe
Santa Cruz de Tenerife
Lunes, 16 de mayo 2022, 12:07
¿Cómo se pueden conservar los diferentes idiomas que hablan las personas políglotas cuando tienen que someterse a una cirugía por un tumor cerebral?. El neurocirujano Jesús Martín-Fernández da la respuesta: operando al paciente mientras está despierto y examinando qué regiones cerebrales corresponden a cada una de las lenguas en las que se expresa.
Jesús Martín-Fernández es neurocirujano del Hospital Universitario de Nuestra Señora de La Candelaria, en Tenerife, además de compositor, y obtuvo repercusión mundial el año pasado por su investigación publicada en «Neuroscience» sobre cómo los distintos estilos musicales activan el cerebro, y en concreto, cómo el reguetón era el que más activa algunas de las zonas implicadas en la enfermedad de Parkinson.
Ahora Martín-Fernández ha publicado un artículo en la revista científica internacional «Brain Sciences» titulado «Mapeo intraoperatorio en pacientes multilingües: ¿Qué sabemos y hacia dónde vamos?«, y que ha realizado junto a los neurocirujanos Alejandro Fernández Coello y Andreu Gabarrós, del Hospital Universitari de Bellvitge y pioneros en la cirugía despierta en España.
«Hemos tratado de responder a los enigmas del multilingüismo haciendo una revisión extensa de toda la literatura científica y aportando la experiencia de los casos intervenidos por este equipo con el que he tenido la oportunidad de formarme, con Alejandro Fernández-Coello y Andreu Gabarrós a la cabeza, referentes de la cirugía despierta en tumores cerebrales en España«, detalla Martín-Fernández en una entrevista.
Desde que a finales de los años 90 del pasado siglo se comenzase a operar mediante la técnica de la cirugía despierta a pacientes multilingües con tumores cerebrales o epilepsia sin respuesta a tratamiento médico, ha permanecido incierto el enigma de cómo un solo cerebro puede gestionar los diferentes lenguajes o cómo se distribuyen a lo largo de nuestro cerebro.
La cirugía despierta es un procedimiento durante el cual el paciente va haciendo test concretos relacionados con el lenguaje a la vez que se estimulan las diferentes regiones del cerebro.
«Cuando aplicamos el estímulo eléctrico es como si generáramos una lesión virtual y transitoria de esa zona concreta dándonos la información de que, si el paciente en ese instante deja de ser capaz de continuar entendiendo o hablando ese idioma, esa región es esencial, y por tanto, debe respetarse para que no pierda sus lenguajes«, detalla el neurocirujano.
Dado que más del 50% de la población es multilingüe, es decir, que habla con fluidez dos o más idiomas, «nos parecía interesante tratar de responder a las preguntas más importantes que han permanecido sin respuesta acerca del fenómeno del multilingüismo, uno de los más complejos que acontecen en nuestro cerebro».
Este grupo de neurocirujanos españoles concluye que existen diferentes zonas del cerebro para cada uno de los idiomas aunque también hay algunas regiones donde coexisten diferentes lenguas, y esta disposición es muy variable entre cada persona.
Por tanto, es difícil de prever teniendo en cuenta que factores como la exposición y el uso del lenguaje o la edad a la que se aprende un segundo o tercer idioma afectan a la organización cerebral de los idiomas.
Aunque a través de una resonancia magnética funcional (una técnica de imagen que informa de qué áreas cerebrales se activan, por ejemplo, durante el habla o durante la comprensión) «nos podemos hacer una idea de qué regiones cerebrales estarían involucradas en los diferentes idiomas en el cerebro de un paciente multilingüe, realmente carece de suficiente resolución espacial y no permite saber qué áreas son las esenciales que debemos de conservar durante la cirugía para que el paciente, tras ésta, pueda mantener todos sus idiomas aprendidos«.
Jesús Martín-Fernández precisa que por este motivo, aunque la resonancia funcional es una herramienta útil, realmente es la cirugía despierta la que podría permitir conservar los diferentes lenguajes, ya que se elimina el tumor tras comprobar primero dónde está ubicado cada uno de los idiomas.
Los investigadores han constatado que hay varios factores principales que afectan a la distribución de los diferentes lenguajes, como la edad a la que se aprenden todos aquellos idiomas que no son la lengua materna; el grado de destreza de cada lenguaje; la exposición y el uso diario de cada lenguaje, así como la distancia lingüística entre los diferentes idiomas (por ejemplo, no es lo mismo español y francés, que comparten su origen en el latín, que el italiano y el chino, que tienen orígenes totalmente diferentes).
A este respecto, algunos estudios de cirugía despierta muestran que aquellos idiomas que se aprenden antes de los 6-7 años tienden a coexistir en las mismas regiones (solapamiento), mientras que los idiomas que se aprenden después de esa edad están organizados de una forma más dispersa.
También estudios de resonancia magnética barajan la hipótesis de que los idiomas adquiridos más tarde y con menos nivel de destreza necesitarían más regiones cerebrales por el esfuerzo que supone hablar y entender la nueva lengua.
Otro aspecto fundamental que ha sido investigado en este artículo es la habilidad para cambiar voluntariamente y sin esfuerzo de un idioma a otro, así como para mantenerlo sin sufrir interferencias de los otros lenguajes. A este fenómeno se le denomina «switching», y sus bases neuronales han sido poco estudiadas.
«Hasta hace poco no sabíamos qué regiones exactamente se encargaban de esta función, la cual es absolutamente fundamental para gestionar de forma efectiva varios idiomas dentro de nuestro cerebro«, precisa Jesús Martín-Fernández.
Hay determinadas regiones que deben de respetarse para que esto sea posible, ya que «cuando estimulamos estas zonas encargadas del »switching« mientras el paciente va haciendo tareas de lenguaje, hemos visto cómo mientras por ejemplo cuenta del 1 al 10, cambia de forma descontrolada de un lenguaje al otro«.
El investigador subraya que el «switching» es un fenómeno extremadamente complejo que involucra tanto regiones superficiales (corteza cerebral) como regiones más profundas (sustancia blanca) de nuestro cerebro, algunas de las cuales probablemente estén aún por descubrir.
Jesús Martín-Fernández precisa que la cirugía despierta con un testeo adecuado de cada uno de los idiomas permitiría preservarlos durante una cirugía de un tumor cerebral que, cuando es de lento crecimiento, «da tiempo a nuestro cerebro a desplazar fuera de la zona tumoral nuestras funciones cerebrales superiores, como es el caso del lenguaje».
Este estudio puede suponer un paso más en el devenir de la neurocirugía oncológica, un mundo extremadamente complejo pero que avanza a gran velocidad, y «un poco más de evidencia de que vamos alcanzando un nivel de conocimiento del cerebro que, aunque limitado, nos permite ofrecer una neurocirugía que no sólo trata de curar o prolongar la vida, sino también una buena calidad de vida, respetando algo tan importante como el lenguaje«.
Probablemente «sea la función cerebral más compleja y que nos hace ser lo que somos y quiénes somos«, apostilla el neurocirujano.