Más de 1.101 días en el hospital con el alta médica
plazas sociosanitarias ·
330 personas ocupan una cama de agudos en los centros canarios porque no tienen quién se haga cargo de ellos en sus domicilios ni tampoco plaza en un centro sociosanitario
Los hospitales públicos de Canarias acogen en la actualidad 330 personas con alta médica, que ocupan camas reservadas para pacientes agudos, a la espera de poder ser derivadas a residencias para recibir la atención sociosanitaria que requieren. Una de ella lleva tres años. Más de 1.101 días 'viviendo', en este caso en concreto, en el Insular de Gran Canaria, donde solo recibe cuidados de aseo y alimentación.
En esta misma situación se encuentra al menos una decena de personas, cuya estancia va de los 800 a 1.000 días, es decir entre los dos y tres años, de las 58 que 'residen' en este momento en el citado hospital.
Ninguna está enferma, al menos no como para seguir ingresadas, y cuentan con el visto bueno de su médico para regresar a casa pero motivos sociales, la incapacidad de las familias para atenderlas pero, sobre todo, la falta de plazas en centros públicos y el cuello de botella administrativo que sufre la comunidad autónoma les tiene «secuestrados» en los centros sanitarios, según critica Ruymán Pérez, portavoz de Intersindical Canaria (IC) en Gran Canaria.
Suelen ser pacientes con una cronicidad clara que no necesita atención clínica pero sí sociosanitaria, que pertenecen en su mayoría a familias con pocos recursos que no pueden atenderles correctamente en sus domicilios
De poco ha servido la Orden conjunta de las consejerías de Sanidad y de Derechos Sociales para regular la derivación a plazas sociosanitarias de tránsito de las personas con este perfi -ocupan camas hospitalarias en centros propios o concertados por el Servicio Canario de la Salud y precisan atención sociosanitaria y no pueden retornar a su domicilio habitual- y que entró en vigor en marzo de este año.
Blas Trujillo, consejero de Sanidad del Gobierno canario, aseguró este viernes durante una visita al Hospital Universitario de Canarias, Tenerife, que se trata de un asunto «complejo» se ha conseguido desplazar a los recursos adecuados a unas 200 personas.
La casuística además es «tremendamente variada y compleja», pues hay casos de personas de mucha edad que si retornan a su domicilio deberían estar al cuidado de otras personas «que tienen aún más edad o que tienen tantos problemas» como ellos, dijo en declaraciones a Efe.
También hay casos de personas que están tramitando la dependencia o incluso que están inmersas en procesos judiciales, esto es, una realidad «muy compleja» en la que la parte sanitaria está intentando «aportar lo que podemos», pues es el ámbito sociosanitario el que tiene que dar respuesta «a esta realidad que condiciona de manera notable la actividad asistencial», puntualizó.
En este sentido, cabe recordar que Canarias presenta un déficit de 8.075 plazas en residencias de mayores para alcanzar la ratio de 5 por cada 100 personas mayores de 65 años y sólo el 41,5% tienen financiación pública, según recoge un informe de la Asociación de Directores y Gerentes de Servicios Sociales, elaborado con cifras del Imserso.
En total, Canarias dispone, a cierre de 2020, de 9.979 plazas residenciales -no se ha creado ninguna nueva en los dos últimos años-, de las que 4.137 son públicas y 5.842 privadas (58,5%).
