Los cambios de la Metroguagua
La prohibición de circulación al vehículo privado en un tramo de la calle Galicia, el cambio de sentido de una parte de Manuel González Martín, la reducción a dos carriles en la plaza Milton o la conversión de Gabriel Miró en una calle sin salida son los principales modificados que la MetroGuagua impondrá en la zona de Ciudad Jardín y Alcaravaneras.
La MetroGuagua obligará a cambiar los hábitos de circulación. Esa máxima general para toda la ciudad tendrá su primera aplicación en las zonas de Ciudad Jardín y Alcaravaneras, donde el Ayuntamiento ha previsto hasta once modificaciones de tráfico. Entre ellas, las más importantes son dos: en primer lugar, el tramo de la calle Galicia entre Víctor Hugo y Pi y Margall se reserva al transporte público, de tal modo que los coches particulares que vengan por Pío XII en dirección a Mesa y López tendrán que desviarse por Menéndez y Pelayo, o subir por Víctor Hugo hasta coger Concepción Arenal; la segunda gran transformación consiste en cambiar de sentido una parte de la calle Manuel González Martín, en concreto la que va desde Pío XII hasta Alemania para poder encauzar el tráfico que viene de la paralela del Estadio Insular y que ya no va a poder girar a la derecha para entrar por Julio Luengo. Ahora deberá callejear por Alcaravaneras para entrar en el túnel por Leopoldo Matos.
Uno de los puntos más delicados es el cambio en la plaza Milton. Allí, se eliminan los carriles de subida del lado derecho (toda esa zona se gana como espacio de acera) y los dos carriles de bajada del lado izquierda se transforman: uno de subida desde Pío XII hacia Albéniz; y otro de bajada desde Wagner hacia Pío XII o Maestro Valle. Esta reducción de viales será puesta a prueba cuando coincida con las horas de entrada y salida de alumnos de la escuela infantil que se construye en la antigua sede de Televisión Española.
Aparte de otras alteraciones menos impactantes, la instalación de una parada de la MetroGuagua frente al colegio teresiano obligará a cortar la salida de la calle Gabriel Miró a Pío XII. De esta manera, dicha vía queda como una calle sin salida. El único acceso a ella será por la calle Doctor García Castrillo.
Además, el acceso al parquin del Mercado Central se hará con un carril de servicio desde la calle Barcelona.
Otra de las novedades es la implantación de los espacios Kiss & Ride, un área protegida, señalizada y segregada en la que los coches pueden parar de manera breve para que se bajen pasajeros. Su uso suele estar vinculado a la descarga rápida de pasajeros en aeropuertos y estaciones de trenes, aunque en el caso de Las Palmas de Gran Canaria se ha previsto en las cercanías de los colegios salesiano y teresiano. La idea es garantizar la subida y bajada de los escolares que se acercan a los centros educativos en los coches de sus familiares de tal forma que sea un proceso ágil, seguro y que minimiza el impacto en la fluidez de la circulación en los alrededores de los colegios. Eso sí, habrá que quitar plazas de aparcamiento.
El Kiss & Ride (besa y conduce) del colegio salesiano se proyecta en la calle Beethoven, a la altura del club de tenis, y en la calle Alejandro Hidalgo.
En cambio, el del colegio teresiano se extiende por la calle Rafael Ramírez, desde Camilo Saint Saens hasta Pío XII.
Estas áreas se usarán con este fin de 07.30 a 17.00 horas los días laborales. El resto del tiempo serán de uso libre por los vecinos.
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