Hay un incendiario sospechoso
El equipo de investigadores del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y la Brigada de Investigación de Incendios Forestales (BIIF) del Cabildo de Gran Canaria creen haber encontrado al autor del incendio forestal que arrasó la cumbre de Gran Canaria en septiembre de 2017. El caso ya está en manos del Juzgado de Instrucción.
Tras meses de investigación, los equipos del Seprona y la BIIF consideran haber dado con la identidad del presunto autor del incendio que arrasó desde el miércoles 20 de septiembre de 2017 más de 2.000 hectáreas en la cumbre de Gran Canaria y que se cobró una vida, la de Carin Birgitta Ostman, una vecina de San Mateo que quedó atrapada entre llamas de hasta 25 metros de altura.
Los investigadores, tras unas pesquisas que se han prolongado durante más de cinco meses, han ido cercando al posible autor de las llamas, en un caso que ya está en manos del Juzgado de Instrucción nº 7 de Las Palmas de Gran Canaria, que ha decretado las actuaciones secretas para no entorpecer la búsqueda de pruebas que incriminen al sospechoso.
En principio y aunque el resultado de las pesquisas llegaron hace unos 20 días a la Ciudad de la Justicia, no se ha podido llevar a cabo la detención por parte de la Guardia Civil del sospechoso puesto que se encuentra ingresado en un centro hospitalario debido a un grave problema de salud. A pesar de este inconveniente, el curso de la investigación sigue su camino.
Según fuentes próximas al caso, el sospechoso de haber quemado deliberadamente la cumbre de Gran Canaria es un vecino de la cumbre que al parecer ya había intentado quemar zonas rurales en anteriores ocasiones, circunstancia que ayudó a los investigadores para dar con él tras un complicado trabajo en equipo llevado a cabo por la Guardia Civil, Cabildo Insular de Gran Canaria y el Juzgado de Instrucción Nº7 de Las Palmas de Gran Canaria.
Se espera que en próximas fechas y en base al avance de las pesquisas, se puedan ofrecer más datos acerca de la identidad del sospechoso y si ha pasado o no a disposición judicial en un suceso que conmovió al archipiélago y se llevó por delante la vida de Carin Birgitta que intentaba salvar a sus animales de las llamas.
Es vecino de la zona y no trabaja para el Cabildo
La identidad del principal sospechoso de haber originado el fuego que quemó el corazón de la isla en septiembre de 2017 se mantiene en secreto por parte de la autoridad judicial, aunque fuentes cercanas a la investigación han adelantado que se trata de un varón, vecino de las zonas cercanas al punto de origen en Tejeda y que estaría relacionado con otras intentonas incendiarias en ocasiones anteriores, aunque no cuenta con antecedentes policiales. El investigado no es empleado del Cabildo Insular, como se había rumoreado erróneamente.
La investigación de las causas del incendio apunta a una única causa humana intencionada, descartando así otras hipótesis como son una negligencia y la causa natural.
Los agentes de la Brigada de Investigación de Incendios Forestales del Cabildo con la colaboración del Seprona de la Guardia Civil delimitaron en su momento la zona de inicio, tomaron indicios y trabajaron en la toma de testimonios para hallar al culpable. Hay que destacar que la zona de inicio de las llamas tiene antecedentes de tres fuegos intencionados en los que podría estar relacionado el sospechoso y no se hallaron en el lugar restos de trabajos con maquinaria ni colillas.
