La ejecución del gasto público hasta junio se come una inversión congelada

La disfunción que ha generado la emergencia sanitaria derivada de la covid-19 se refleja ya en las cuentas autonómicas en las que, de los 335 millones presupuestados para gasto corriente, se ha comprometido el 33,66%, y de los 4.669 millones de euros para transferencias corrientes, el 48,55%.

Esto tiene su réplica en el gasto por políticas. Así, la «producción de bienes públicos de carácter preferente -sanidad, educación, entre otros- y las «actuaciones de protección y promoción social -las de carácter benéfico-asistencial, por ejemplo- alcanzan niveles de ejecución similares al conjunto del Presupuesto -47,84% y 47,67%, respectivamente-. Por ello, las «actuaciones de carácter preferente -fomentan el desarrollo de sectores económicos- quedan relegadas al 24,97%.

La congelación del presupuesto en inversiones reales y transferencias de capital en lo que se lleva de año tiene su traslación al nivel de ejecución que registran las consejerías con mayor potencial en estas áreas de actuación.

Así, Obras Públicas, Transporte y Vivienda que dirige Sebastián Franquis está en 103 millones de obligaciones comprometidas, de un presupuesto que rebasa los 368 millones -28,59%-. Dentro de esta consejería destaca además la baja ejecución presupuestaria en el Instituto Canario de la Vivienda, un 14,73% .

A peor ritmo van Transición Ecológica, de José Antonio Valbuena, con un 20,24% de ejecución presupuestaria, y Turismo de Yaiza Castilla, con un 25,65%.

Por contra, la Consejería de Derechos Sociales, Igualdad, Diversidad y Juventud, con Noemí Santana al frente, lidera el presupuesto comprometido con el 50,38%%. En su ámbito, destaca el Instituto Canario de Igualdad, con el 72,05% ejecutado.

Entre los organismos autónomos cabe llamar la atención sobre el Servicio Canario de Salud (SCS). Hasta junio, lleva comprometido 1.760 millones de los 3.202 millones presupuestados, lo que significa un 54,97%. Solo en transferencias corrientes el gasto se sitúa en el 62,65% .

Sin embargo, el gasto comprometido del Servicio Canario de Empleo se sitúa por debajo del global, al alcanzar el 34,36%. Tampoco las transferencias corrientes que ha ejecutado esta entidad hasta el mes de junio son altas, exactamente un 21,64%. Ello pese a que el desempleo es uno de los problemas más importantes que está dejando tras de sí la pandemia.

En cuanto a la recaudación líquida de los tributos derivados del Régimen Económico y Fiscal (REF), los datos reflejan una caída del 20,86% entre junio de 2019 y del mismo mes del año en curso. La pérdida por IGIC se sitúa en el 20,84% mientras que el impuesto de matriculación cae el doble, un 41,82%.

Hasta junio se obtiene un 37,16% de la recaudación líquida presupuestada de los impuestos indirectos y el 53,72% de los directos.

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