Willy, te queremos
CRÍTICA DE TELEVISIÓN ·
La historia de los míticos dibujos sigue atrapando, al igual que su reconocible música
Mientras decidía qué camiseta con brillibrilli se ponía, mi hija pequeña (cinco años) me informó de que el mundo es un balón, tiene mucha agua ... y que hay gente diferente. Le agradecí la información y seguimos buscando en el armario la prenda con más reflejos que una bola de discoteca. Ya en la calle, ella insistió con las novedades geográficas planetarias desde la «época dinosauria» hasta la actualidad. En sus explicaciones me comentó que, para ver cosas del mundo, había unos dibujos de un león con sombrero que viaja mucho con sus amigos y una chica muy guapa. Se lo había dicho la profe. Me remató al decirme que los dibujos eran tan viejos como yo.
Solo había una respuesta al enigma: 'La vuelta al mundo de Willy Fog'. Al llegar a casa, los busqué en RTVE Play. No estaban. Los encontré en Prime Video junto a 'David el Gnomo' y 'D'Artacan y los tres mosqueperros'. Tres trozos de mi infancia gracias a Claudio Biern Boyd y su BRB Internacional. A la peque le dije que yo los veía cuando iba al cole, que entonces no había tantos canales, solo se podían ver a una hora determinada y no cuando uno quisiera o que eran los únicos dibujos que había en la tele. Le dio igual. «Quiero el león con sombrero», me dijo al estilo Clint Eastwood en 'El sargento de hierro'.
Vimos un par de capítulos juntos. No pude evitar interpretar la canción de Mocedades, demostrando mis nulas capacidades para la música. Los dibujos han envejecido mal, obviamente, pero no han perdido su encanto ni su poder de atracción para los más pequeños, a los que les da igual ver 'Blancanieves' (casi 86 años desde su estreno) que la última genialidad de Disney. La historia les atrapa. Al menos a la mía. Y yo también estoy atrapado: no me quito la sintonía de la cabeza.
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