Esposa, madre y espía
Keira Knightley es aparentemente la ideal ama de casa londinense, madre y esposa de un político conservador, pero en realidad es una espía inteligente, perspicaz y muy rápida
Ante la inmensa cantidad de series que se estrenan estos días prenavideños, es muy difícil decantarse por una y acertar a la primera. Hace falta ... algún gancho. En mi caso el gancho ha sido la protagonista, Keira Knightley, que llevaba 20 años sin hacer una serie. Si se ha decantado por 'Palomas Negras' será por algo. Si además es británica y consta solo de seis episodios, de esos que te los ventilas en un plis plas, miel sobre hojuelas. Reconozco que esta serie de Netflix me ha atrapado desde el principio, tiene intriga, es pausada pero también tiene acción que va aumentando conforme avanza (alguien diría que es influencia de Tarantino), humor y alguna que otra sorpresa. Y transcurre en las navidades. No puede ser más oportuna.
Keira Knightley es aparentemente la ideal ama de casa londinense, madre y esposa de un político conservador, pero en realidad es una espía inteligente, perspicaz y muy rápida; esto se sabe a los pocos minutos, pero no trabaja para ningún país extranjero ni para ninguna gran corporación multinacional, sino que pertenece a las 'Palomas Negras', una organización criminal que roba todo tipo de información para vendérsela al mejor postor. Y ella vende los secretos de su marido. Todo comienza con el asesinato de su amante secreto, con la muerte del embajador chino y la desaparición de su hija. Tiene bastantes flash back, y hasta aquí les puedo contar.
Ben Whishaw y Sarah Lancashire completan el reparto, y un Londres muy reconocible y navideño es el marco que encuadra la trama. 'Palomas Negras' ya tiene asegurada una segunda temporada. El retrato de una esposa perfecta que es a la vez una madre abnegada y una espía sin piedad, que conoce demasiados secretos. Por supuesto, no busquen verosimilitud, simplemente veánla y pasenlo bien.
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