Junts señala desde el Congreso a los jueces del 'procés' ante el silencio del PSOE
El PP arrecia en sus críticas a Armengol por permitir en la Cámara «ofensas» a servidores públicos sin exigir una rectificación
El PSOE trató de rebajar durante semanas el malestar de las principales asociaciones judiciales y el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) por el polémico ... párrafo del pacto de investidura con Junts en el que se especifica que las conclusiones de las investigaciones parlamentarias que empezarán a funcionar en breve en la Cámara baja deberán ser tenidas en cuenta a la hora de aplicar la ley de amnistía «en la medida que pudieran derivarse situaciones comprendidas en el concepto 'lawfare' (guerra judicial)» . Este martes, sin embargo, en el debate en el que se aprobó su creación, tanto los socialistas como la presidenta de la Cámara guardaron silencio cuando la portavoz postconvergente, Míriam Nogueras, señaló directamente desde el escaño a jueces y magistrados que han actuado de una u otra manera en causas relacionadas del 'procés'.
Francisco Pérez de los Cobos; Manuel Marchena, Carlos Lesmes, Concepción Espejel, Carmen Lamela y Pablo Llarena... «En un país normal –llegó a decir Nogueras– serían cesados y juzgados de inmediato». El portavoz del PP, Miguel Tellado, reclamó a Francina Armengol que exigiera a la diputada independentista retirar las «ofensas» contra servidores del Estado. «Su función es evitar que esto suceda, no puede venir aquí a pasar la tarde», le recriminó. La presidenta del Congreso replicó, no obstante, tajante: «Conozco perfectamente cuáles son mis funciones y usted debería conocer las suyas».
La Cámara acabó aprobando de manera holgada, con el apoyo de la mayoría del bloque de investidura, a excepción de Coalición Canaria, y la oposición férrea de PP, Vox y UPN la creación de los tres órganos reclamados: dos a propuesta de Junts, junto con el PNV, sobre la 'Operación Cataluña' y los atentados islamistas de Barcelona y Cambrils, y otro planteado por Esquerra, Bildu y BNG, sobre el espionaje con el programa' Pegasus'. Pero lo hizo tras un debate agrio que sirvió para acrecentar los recelos de los populares hacia Armengol y para evidenciar, una vez más, la mala relación entre las dos principales fuerzas del independentismo catalán, en dura competencia electoral.
Concluido el debate, y tras oír cómo desde la tribuna los distintos portavoces del PP le recriminaban su actuación, Armengol se quejó. «Entiendo que hay mil maneras de defender los argumentos, pero hacerlo cargando contra la presidenta de la Cámara, que es la única que no puede defenderse, no es la mejor manera», criticó.
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