Borrar
Francia se blinda ante las protestas del sábado

Francia se blinda ante las protestas del sábado

El Gobierno francés teme la presencia de armas en las protestas convocadas este sábado por el movimiento de los "chalecos amarillos", en el que denuncia la deriva violenta de una parte instrumentalizada por grupúsculos extremistas. El ministro del Interior, Christophe Castaner, justificó esos temores al explicar, en conferencia de prensa, que en las investigaciones tras los altercados del pasado sábado "se han descubierto armas".

Agencias / París

Jueves, 1 de enero 1970

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Castaner ha enumerado algunos ejemplos, como que el jueves se detuvo a una persona, de la que no quiso dar su identidad, que se había significado en las redes sociales por las amenazas contra las fuerzas del orden o por decir querer "matar la República", y en cuyo domicilio se encontraron dos pistolas, además de material para participar en manifestaciones.

También contó que el pasado sábado en París un grupo de manifestantes robó un fusil a un policía que trataba de escapar del incendio de su furgón, y que recibió una paliza.

En esa línea, el portavoz del Gobierno, Benjamin Griveaux señaló en una entrevista publicada por "Le Parisien" que los servicios secretos sospechan que en las manifestaciones podría haber elementos "politizados y radicalizados" que tratan de instrumentalizar a los "chalecos amarillos" con la intención de "derrocar el poder".

"Frente a la violencia sistemática, organizada, nuestras fuerzas responderán con firmeza", advirtió el titular de Interior, que hizo hincapié en que el movimiento de contestación se deshincha progresivamente.

Contó que de los 282.000 "chalecos amarillos" del 17 de noviembre -fecha de la primera protesta-, ahora se han quedado en "unos 10.000 en toda Francia", es decir "una pequeña minoría" en la que hay gente pacífica pero también otros que "han caído en la violencia".

Castaner estimó que en la convocatoria de mañana en París "no habrá más que unos miles de personas", pero entre ellos elementos "ultraviolentos", y dijo no excluir que también lleguen extremistas del extranjero.

El ministro, que no quiso dar detalles sobre el dispositivo policial para no ofrecer pistas, se limitó a repetir que se van a movilizar a 89.000 agentes en todo el país, de los cuales 8.000 en París, frente a los 65.000 que hubo la semana pasada.

Habrá "medios excepcionales" que incluirán una docena de blindados de la Gendarmería que se pueden utilizar para despejar barricadas.

Los principales monumentos, cerrados

La Torre Eiffel, el Museo del Louvre, y la Ópera de París se suman a la lista de monumentos, museos y comercios parisinos que cerrarán sus puertas como medida de seguridad ante el riesgo de disturbios. La Société d'Exploitation de la Tour Eiffel, empresa que explota el icónico monumento parisino, ha anunciado en un comunicado que "las manifestaciones anunciadas no permitirán recibir visitantes en buenas condiciones de seguridad". A los visitantes que hayan comprado billetes para ese día, les serán automáticamente reembolsados.

También cerrarán el sábado los museos parisinos Grand Palais y el Petit Palais, la Ópera al igual que, el Museo del Hombre, el Palacio de Chaillot y la Ciudad de la Arquitectura y del Patrimonio, ni abrirán sus puertas las dos sedes de la Ópera de París, la del Palacio Garnier y la Plaza de la Bastilla.

La manifestación del pasado sábado provocó daños en la ciudad valorados en millones de euros, por ello el primer ministro francés, Édouard Philippe, ha asegurado que se movilizarán "medios excepcionales" ante el temor de que esta nueva convocatoria degenere una vez más en actos violentos.

Anulaciones "en cascada"

Los comercios, hoteles y restaurantes de los Campos Elíseos tuvieron un perjuicio de 10 millones de euros tras las protestas del pasado fin de semana. Unas pérdidas que temen se repitan este fin de semana y que afecten además al resto del periodo navideño.

Los sindicatos de hostelería cifran entre un 20% y un 30% las caídas de reservas en los restaurantes, mientras que en los hoteles las anulaciones han llegado hasta el 50%. Gran parte de las cancelaciones corresponden al período de Navidad, el último pico turístico de cierre de año.

Estos altercados podrían diluir la recuperación turística que estaba registrando París tras los atentados de 2015. Además de París, los bloqueos a las carreteras también afectan al turismo doméstico ya que los franceses viajan menos a zonas rurales y centros de esquí.

Francia fue en 2017 país más visitado del mundo, con 89 millones de llegadas internacionales, y la aspiración del Gobierno francés era llegar al hito de los 100 millones para 2020

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios