Panadero desvela en Mapfre los secretos de su trabajo
Miguel Panadero (1970) confiesa que, como la mayor parte de los artistas, es obsesivo en su trabajo. Todas las mañanas necesita encerrarse en su estudio a crear. Ahora, muestra al público Secretos, un centenar de bocetos, acuarelas, cuadernos y dibujos que realiza para buscar la obra definitiva y que este jueves abre sus puertas.
Sin desvelar del todo la magia, Miguel Panadero enseña en la Fundación Mapfre Guanarteme parte del misterio que esconde su trabajo. Lo realiza a través de la propuesta Secretos que reúne una selección de piezas de seis series producidas en los últimos 15 años. La exhibición incluye un centenar de obras entre pinturas, esculturas, cerámicas, dibujos, acuarelas, impresiones digitales y grabados. "Hay de todo. La idea es enseñar lo que no se suele mostrar. Normalmente se expone la obra definitiva y te guardas los bocetos y los cuadernos porque se consideran menos relevantes pero, en realidad, son más importantes para entender tu trabajo", explica el autor.
Estas piezas preliminares, en el caso de Panadero, son sustanciales. El artista emplea distintas técnicas, formatos, soportes y materiales para darle forma a sus reflexiones. "La misma idea la puedes atacar de distinta manera; con acuarela, pintura al óleo, colores planos, esculturas en madera, cerámica, bronce, hierro... Quería compartir con la gente esta búsqueda, la inquietud por compartir", asegura el creador que llevaba cinco años sin protagonizar una exposición individual en Gran Canaria.
"De las que he hecho, esta es la exposición que busca una mayor aproximación al espectador. Normalmente uno es más hermético, más reservado", asegura. Aunque en el catálogo da claves sobre el sentido de su trabajo en conjunto, evita descifrar el significado de sus piezas. "Si te cuento por qué hice una obra, igual le quito la magia. Ni la pintura, ni la poesía, ni la música se deben explicar. Lo cual no quita para que podamos hablar mucho de ellas", comenta el artista.
Con su experimentación estilística y formal busca distintas vías con las que abordar las mismas cuestiones. "Mi trabajo tiene que ver con el ser humano: de dónde venimos, a dónde vamos, qué hacemos aquí... Todo nace de esas preguntas y de la necesidad de compartir inquietudes".
