El entusiasmo, el reto y la fiebre del sábado noche
La LPA Night Run 2014 cumplió con los pronósticos. La diversión estuvo garantizada. La ilusión de miles de corredores -solo hay que ver sus rostros al cruzar la meta- por cumplir con sus particulares retos desataron la locura y la fiebre del sábado noche en Las Palmas de Gran Canaria. Esta carrera nocturna con 4.000 participantes, aunque tomaron la salida 3.257 corredores, generó mucha expectación y la zona del Intercambiador del Parque de Santa Catalina, lugar de salida y meta, fue el punto neurálgico de una noche diferente.
Con seis minutos de retraso, y tras algún que otro susto por los fuegos artificiales en el arco de salida, se dio el pistoletazo a una carrera que mejoró notablemente el circuito del pasado año, aunque esto provocó un caos circulatorio de enorme magnitud desatando muchos nervios en infinidad de vías de la ciudad. Los favoritos al medio maratón y al 10.000 cumplieron con las quinielas previas.
El joven teldense Francisco Cabrera Galindo, del CAI Gran Canaria, fue el gran triunfador de la noche. Batió su mejor marca y detuvo el cronómetro en 1 hora, 12 minutos y 46 segundos. Recorrió los 21 kilómetros a una media de 3 minutos y 27 segundos el kilómetro. Llegó a meta feliz y contento. Mantuvo una dura pugna con Yeray Alemán, del Carucat, pero en Vegueta Francisco Cabrera Galindo dio el tirón definitivo que le sirvió para entrar en meta con casi un minuto de ventaja. En podio lo completó Rafa Suárez -1:16.10-.
En categoría femenina, Patricia Díaz no tuvo rival. Dominó de principio a fin. Hizo un crono de 1:21.07, pero lo más destacable es que ocupó la octava posición en la clasificación absoluta. Sonia Prieto y Erika Gabriela la acompañaron en el podio.
En cuanto a la prueba de 10 kilómetros. Saúl Castro -31 minutos y 37 segundos- se impuso en los metros finales, ya en Mesa y López, a Alejandro Santana -31:37-. Antonio Méndez finalizó tercero. Paula Luzardo ganó en chicas por delante de Bárbara González y Vanesa Serván. En la LPA Night Run 2014 es destacable la alta participación femenina. Un 36% de los inscritos fueron chicas, lo que refleja bien a las claras el aumento de la afición por el running y la motivación que están encontrando en pruebas como ésta.
Los corredores llegaron felices y contentos a meta tras cumplir con sus retos. Esa sensación es difícil de explicar, hay que vivirla. Este deporte sigue en aumento y en Canarias continúa ganando adeptos, como se reflejó anoche con una cantidad importante de corredores que debutaban en una carrera.
Durante el recorrido, al margen del aspecto circulatorio que se mejora con mayor información previa, con una mentalización generalizada del ciudadano de que el sábado por la noche deje el coche en casa y un reforzamiento del transporte público, los más de 3.257 participantes se vieron muy respaldados por el calor del público. Las Canteras, Guanarteme, León y Castillo, Triana o Vegueta fueron zonas con muchísima afluencia de público.
La LPA Night Run 2014 subió en calidad organizativa respecto a 2013. Esta carrera solo lleva dos años de vida, pero va con paso firme hacia las metas que pretende, con matices importantes a mejorar. Queda un largo camino por delante, pero correr de noche gusta y el formato de la prueba es del agrado de todos. Ese aire festivo y popular de la carrera engancha y gana adeptos a la causa. La animación estuvo garantizada y la marea naranja tomó las calles de Las Palmas de Gran Canaria en un sábado noche distinto, donde el deportista tomó las calles.
Las Palmas de Gran Canaria vivió ayer una noche diferente gracias a la LPA Night Run.
