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El Cabildo no descarta hacer más batidas de cabras en 2017

El Cabildo no descarta hacer más batidas de cabras en 2017

Jueves, 1 de enero 1970

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El Cabildo no descarta hacer nuevas batidas de cabras asilvestradas en los montes de Guguy, Inagua y Tamadaba en 2017 para reducir su población y a la vez abrirá «en breve» un plazo para solicitar apañadas. La ultima batida, el pasado abril, acabó con 140 de los más de 400 ejemplares vistos.

Con una tasa de reproducción que dobla la del ganado estabulado, las cabras asilvestradas que campan a sus anchas por los montes públicos de Guguy, Inagua y Tamadaba, entre otros espacios naturales protegidos, siguen siendo la principal amenaza de las repoblaciones forestales del Cabildo en tales lugares y de los endemismos botánicos de las cumbres y el oeste de Gran Canaria. El control de esta población con las apañadas es «compatible» con las batidas a tiros, pero «insuficiente» para evitar su proliferación. Así lo afirmó este jueves el consejero de Medio Ambiente, Juan Manuel Brito, en Comisión de Pleno al responder a una pregunta de la consejera María del Carmen Rosario (PP) sobre sus previsiones para el control del ganado caprino asilvestrado a lo largo de este año. Brito explicó que su departamento abrirá «en breve» un nuevo periodo para solicitar la realización de nuevas apañadas (capturas en vivo) por parte de particulares en esos montes, sin descartar otros, pero dejó claro que esta opción «no impide otras medidas» para el control «sistemático» de la población actual de cabras asilvestradas. De las 19 apañadas solicitadas y autorizadas por el Cabildo en 2016, hasta el pasado 31 de diciembre únicamente se hicieron «cinco o seis» sin que Medio Ambiente tenga datos de sus resultados porque los participantes no estaban obligados a comunicar la cifra de ejemplares que capturaran. El destino de esas cabras, en cualquier caso, no podía ser otro que el consumo de su carne por esas personas. Sobre las posibles batidas en 2017, Brito agregó que «no está definido aún cómo» se llevarán a cabo y comentó que «será donde haya más presencia» de ejemplares asilvestrados. «Nunca hemos negado la captura en vivo y no es incompatible con las batidas, pero si es insuficiente», sentenció sobre la necesidad de reducir la población de ganado sin control en los montes públicos protegidos. El consejero de Medio Ambiente recordó que la primera batida que autorizó, en noviembre de 2015 con el resultado de 73 ejemplares muertos, no fue la primera hecha por el Cabildo, que en el mandato anterior aprobó dos, en marzo y noviembre de 2012, en secreto. Frente a las 284 cabras asilvestradas abatidas a tiros en las fechas indicadas, en las 20 apañadas con pastores realizadas entre 2009 y 2011 se logró capturar a 47 ejemplares. La consejera popular María del Carmen Rosario resaltó en su pregunta que «tras la presión social» surgida durante las dos últimas batidas a tiros autorizadas por el Cabildo, que calificó como «matanza de cabras», el consejero de Medio Ambiente «optó por las apañadas» como medida de control del ganado caprino asilvestrado. Tales batidas, recordó también, fueron realizadas por un equipo de tiradores profesionales contratados para eso y traído desde la Península.

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