Dosss, el bar gastronómico donde todo está bueno

A la misma hora en que los ingleses se sientan a tomar el té, Luwack da paso a Dosss en la calle Joaquín Costa 24, una apuesta con dos padrinos a la que le sobra altura gastronómica: Ale Mederos (Anteo), junto con su socio, Ondrej Vymetalik y capitaneando en cocina por Óscar Mayer con una dilatada y deliciosa trayectoria.

En Dosss conocen desde el primer día de su apertura como entretener y sorprender al paladar. Como reversionar los clásicos y como estimular para hacer de cada receta un bocado de firma única.

Su horario y sus días de apertura también nos hablan de esos espacios cargados de sosiego, donde tomarse un buen vino por copas, una buena cerveza o un vermut, dentro o en terraza, mientras se disfruta de tapas generosas que bien podrían ser consideradas raciones y de raciones que nos piden compartir con quien nos acompañe.

Los domingos y lunes cierran, pero, de martes a sábado, algunos días a partir de las 18:00 y otros desde las 17:00 y hasta bien entrada la noche, tomar asiento en alguna de las mesas conformarán un plan redondo y sabroso. Y un dato importante: admiten reservas, (828 680 250) que siempre será mejor llamar antes de ir que no quedarse con las ganas.

La carta se concentra en un solo folio, pero a diario habrá algún fuera de carta que seguro llamará la atención.

De resto, nos dan el pistoletazo de salida, por muy comunes que nos parezcan, tablas, encurtidos y quesos que en Dosss tienen esa mano con la que añaden el toque diferenciador. Y una recomendación, en su elección que nunca falten las gildas porque su aliño con un sutil picante las convierte en más irresistibles si cabe.

Los escabeches de Mayer siempre han formado parte de su equipaje gastronómico y en Doss también han encontrado su espacio, de gallo o de puerro, elijan según gustos. Pero lo que se puede dejar de porbar en Dosss en su ensaladilla. Prepárese para apuntar una nueva favorita en su lista.

Unos delicados espárragos de magnífica textura o una escalivada insuperable también forma parte de esos arranques que ellos llaman tapas como muestra del carácter espléndido de este local porque, ya no son muchos los locales en donde comer y beber bien se ajuste de igual manera a su precio.

Si se trata de algo más contundente, hasta un guiso puede ser el mejor invitado a la mesa, pero seguro que no podrán resistirse a su brioche de cerdo ibérico donde la intensidad también llega rebosante de las nuevas y buenas intenciones de este local.

Prácticamente con la misma extensión llenan la carta con su propuesta liquida, cervezas convencionales conviven con cervezas artesanales, vinos naturales por copas y por botellas que se completan con referencias clásicas y refrescos donde no faltan kombuchas. Una apuesta donde cualquiera encontrará una buena manera de acompañar el bocado. Y no le faltan buenas etiquetas de vermut.

Torrija o fresas con chantilly, cualquiera de las dos en su mejor versión como punto dulce final de los ratitos especiales que se disfrutan en Dosss. Un concepto a simple vista sencillo, pero donde son capaces de abstraer a su público del ajetreo urbano. Un pequeño oasis donde el buen ambiente se equilibra con bocados intensos y deliciosos y, sin necesidad de bola de cristal, ya sabemos que Dosss dará mucho que hablar porque tiene mucho que contar, en cada plato y en cada copa.

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