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Los precios del alquiler han marcado este verano máximos históricos en las dos capitales canarias debido al aumento de la demanda. Arcadio Suárez
El precio del alquiler se dispara y alcanza máximos históricos

El precio del alquiler se dispara y alcanza en las capitales isleñas máximos históricos

En Las Palmas de Gran Canaria es imposible encontrar una vivienda por menos de 550 euros ni siquiera en los barrios alejados del centro

Silvia Fernández

Las Palmas de Gran Canaria

Jueves, 1 de septiembre 2022

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El precio del alquiler se disparó el año pasado en Canarias como consecuencia de una demanda creciente y una oferta de viviendas que se ha reducido en parte por el buen momento que vive el mercado inmobiliario y que ha impulsado las ventas.

La subida, superior a los dos dígitos, ha llevado los precios a máximos históricos, por encima de los que se registraban antes del covid y en los años de bonanza previos a la Gran Recesión.

El repunte de los precios fue prácticamente generalizado en todos los municipios de las islas aunque es en las capitales y sures del archipiélago donde ha sido más intensa la subida, según los datos que maneja Idealista. En la capital grancanaria, el metro cuadrado se situó en casi 11 euros de media mientras que en Mogán rozó los 15 euros y los 16 en San Bartolomé de Tirajana.

En la capital grancanaria la subida anual es de un 8,7%, por encima de la inflación que cerró 2022 en un alza del 5,7%, hasta alcanzar los 10,9 euros el metro cuadrado. Pese al repunte de la capital grancanaria, el aumento está lejos al registrado por otras capitales españoles como Barcelona, donde el alquiler se encareció casi un 26%; Alicante, con un 23,4%; Valencia, con un 20,9% y Málaga, con el 20,7%. En Canarias hay municipios donde los precios caen, como en La Laguna, donde el alquiler se ha abaratado un 4,3%, según el Idealista.

Otro de los grandes portales, como Pisos.com, apunta a que el precio del metro cuadrado en la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria es de 11,2 euros mientras que en Santa Cruz de Tenerife alcanza los 10,22 euros.

Nada por menos de 550 euros, ni en los barrios

Actualmente y como indican distintas fuentes del sector inmobiliario consultadas, en Las Palmas de Gran Canaria es «prácticamente imposible» encontrar una vivienda en alquiler y digna para vivir por menos de 550 euros ni siquiera en los barrios más alejados del centro. En ciudad baja el precio mínimo de un piso de dos habitaciones ronda los 700 euros y de ahí, para arriba.

«Estamos en un momento en el que el que pone el precio es el propietario. Él es el que manda en el mercado», dice el brokér de Era Grupo Arcoiris, Rafael Bello.

El responsable de la firma inmobiliaria Venportucasa, José Saavedra, asegura que la demanda es tan fuerte en la capital grancanaria que ante un cartel de vivienda en alquiler se pueden llegar a recibir hasta 60 peticiones en una semana. Según explica, en torno al 70%-75% de quienes buscan una casa en Las Palmas de Gran Canaria quieren que sea en el centro.

La demanda ha crecido entre un 15% y un 20%

El repunte de la demanda en los últimos meses y que se estima en entre un 15% y un 20% responde a distintos factores.

Saavedra apunta a una «cuestión estructural y no coyuntural», en el sentido de que estamos ante un cambio de mentalidad en las nuevas generaciones que no quieren comprar sino vivir de alquiler. A esto se une un trasvase de clientes que iban a comprar pero que, ante las perspectivas de subida de los tipos de interés y cambio del mercado, entran en el arrendamiento.

Para Bello hay otro elemento que está inflando la demanda y es la llegada a las islas de teletrabajadores que buscan casa. «Los nómadas digitales es un tipo de cliente que hace unos años no existía y que ahora tira con fuerza del mercado», dice.

Además de personas jóvenes que buscan independizarse la demanda se ha visto fortalecida por personas mayores y ya jubiladas que cambian su residencia a la capital para tener más cerca los servicios. En estos casos buscan las calles céntricas no los barrios periféricos. «Antes del covid el mercado del alquiler había entrado en una fase de estabilidad pero en los últimos meses la demanda ha crecido mucho y tirado de los precios hacia arriba», apunta Saavedra.

Por el lado de la oferta de viviendas, en los últimos meses se ha registrado un ligero descenso. El temor a una subida de tipos animó el mercado inmobiliario y ha llevado a algunos propietarios a vender recortando la oferta en alquiler. El hueco no se están cubriendo con nuevas viviendas porque los niveles de construcción son bajos.

En esta ocasión la vivienda vacacional no es una causa del menor número de la oferta en alquiler. Según indican Saavedra y Bello, pese a la mejora en la llegada de turistas no son muchos los propietarios que están cambiando al vacacional. «Muchos de ellos se han dado cuenta que gestionar un alquiler vacacional es algo complejo y lleva su tiempo. Además, con la covid muchos entraron en este segmento y se han dado cuenta de sus ventajas», manifiesta Saavedra.

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