Derrota con castigo para la UD (0-1)
Acaba 2021 fuera del playoff tras caer ante el Éibar
ignacio s. acedo
Las Palmas de Gran Canaria
Sábado, 18 de diciembre 2021, 16:59
La UD se dejó algo más que tres puntos ante el Éibar en el Gran Canaria. También su sexta plaza en la tabla, lo que hace que su despedida de 2021 deje un especial mal sabor de boca al suponerse que el objetivo mínimo exigible para esta plantilla es estar entre los seis primeros de la categoría. En un partido sin acierto y negación ofensiva, decidió un solitario tanto de Stoichkov en la primera mitad.
Se sabía que el Eibar vendría a discutir balón y espacios, presionando con bloque alto y con sus jugadores aplicándose como lobos en el achique adelantado, sembrando de piernas, faltas y trampas cada intento de salida de la UD. Le costó una enormidad al equipo salvar esa trinchera. El recurso de dársela a Viera o Moleiro, asociados por el flanco derecho, funcionó, aunque, por recurrente, facilitó la tarea del rival, muy ortodoxo en el reparto de tareas y con una colocacion impecable. En un partido de equilibrios y ajustes, Las Palmas encontró antes las ocasiones que el fútbol y, por merecimientos, que se fuera al descanso por debajo en el marcador no reflejó el tráfico en las áreas, más insistente en el rectángulo de Yoel.
Fue la primera mitad un ejercicio de impotencia de los muchachos de Mel, negados en cada intento y con dificultades a la hora de juntarseo buscar la amplitud por los costados.
A modo de embudo, sin bandas, sitiado Jes, vivió con cierta confortabilidad el visitante por mucho que el inicio trajera dos acciones ofensivas que pudieron acabar en la jaula. Primero Viera, con un tiro que, tras dar en un defensa, acabó impactando en el palo y, sin tregua, Lemos, con un sutil latigazo que se quedó en la red lateral.
El paso de los minutos, no obstante, anestesió el asunto, favoreciendo la crecida de un Eibar paciente en su toma de decisiones y que empezó a prosperar desde el orden y una mejor distribución de jugadores, con llegadas por izquierda y derecha, manteniendo en el centro a Stoichkov, un dolor para cualquier defensa por su facilidad para recogerse e irrumpir. Así llegaría su gol aunque antes no hubo necesidad de que llegara su diana para comprobar que los peligros se concentraban alrededor de su figura.
A golpe de martillo continuó la UD abriéndose sitio arriba y tuvo otro instante de fuego cruzado, esta vez Jesé y Navas en intentos que Yoel desbarató con serenidad. Hasta la media hora no se requirió la presencia de Raúl, lo que habla de la paciencia que tuvieron los de Garitano en asomarse al marco contrario. Fue con una irrupción de Quique, habilitado por la latifundio que dejó a su espalda Lemos, que se marcó una carrera limpia para cruzarla ante la salida del meta. Por centímetros no entró. Aviso de lo que estaba por venir segundos después, coincidiendo el cambio por lesión de Lemos y entrada acelerada de Ferigra. Por el mismo eje de la retaguardia le cayó a Stoichkov un rebote y, sobre la marcha, instinto asesino, largó por abajo un trallazo imposible para Raúl. El don de la oportunidad. Primer remate entre palos y facturación del 0-1. No llegó otro de milagro al saque desde el centro del campo y tras despiste monumental.
No le funcionaba ni en el fondo ni en la forma a Mel el plan de partido, a merced de un Eibar ya sí por encima en sensaciones y aciertos, lo que no impidió, paradojas, que antes del intermedio volviera a llover sobre Yoel con un doble remate sus guantes y un testarazo de Navas, inusual delatero centro, que se marchó por muy poco. Así se gestionó el partido en su ecuador: colmillos afilados del rival y asimetría y cierta tendencia al caos en el bando propio, con una negación evidente arriba que impidió mayor vuelo.
No le gustaba nada de lo que estaba pasando a Mel y agitó el árbol hasta meter tres piezas nuevas para el reinicio. Lo que fuera por cambiarle el aire a un desarrollo que llevaba mal camino. Kirian por Loiodice para ganar verticalidad y galones para Peñaranda como maniobras de tres cuartos en adelante para ganar metros e intimidación.
Pero no contaba con que todo se iba a encanallar con un gol anulado a Stoichkov por falta clara a Ferigra, con rectificación mediante VAR de por medio, chanzas del respetable y tumulto con expulsión del auxiliar de Garitano, y un cruce de agresividades entre Arbilla y Viera. Resultado: nada de fútbol y un puñado de minutos, demasiados, tirados a la basura. Le convenía al Eibar exactamente eso. Que no pasara nada y el reloj volara al tramo final.
A diferencia de lo que se había podido ver, ya pesaban las piernas y costaba pisar zona influyente. Hubo que tirar hasta de Pejiño, que reaparecía en combate quizás de manera precipitada por la exigencia mayor que le esperaba, marcador negativo, oponente bien parado y apenas un cuarto de hora para dejar huella.
Más a base de orgullo que de recursos, Viera, Jesé y Peñaranda descolgados a la espera de cazar alguna, quiso cambiar su suerte la UD, por momentos perdida en su desesperación y lamentos al constatar que no había manera. Como así sería hasta el pitido final.
Ficha técnica:
0- UD Las Palmas: Raúl, Lemos (Ferigra, min. 32), Eric Curbelo (Díez, min. 46), Navas, Cardona, Loiodice (Kirian, min. 46), Fabio, Moleiro (Pejiño, min. 71), Benito (Peñaranda, min. 46), Viera y Jesé.
1- SD Éibar: Yoel, Tejero, Etxeita, Arbilla, Toño García, Muñoz (Atienza, min. 69), Sergio, Corpas (Olabe, min. 90), Expósito, Corpas, Stoichkov (Leschuk, 79) y Quique (Rahmani, min. 69).
Gol: 0-1, min. 34: Stoichkov.
Árbitro: Prieto Iglesias (comité navarro). Amonestó a los locales a Curbelo, Ale Díez, y Peñaranda y a los visitantes Tejero, Javi Muñoz, Olabe, Sergio Alvarez. Expulsó con roja directa al segundo entrenador del Éibar Patxi Ferreira.
Incidencias: 10.300 espectadores en el Gran Canaria.