Araujo acelera y Fabio, baja hasta octubre

El regreso al trabajo tras el inicio de la competición vino adornado ayer con buenas y malas noticias a propósito de la enfermería de la UD. Por un lado, la novedad que ilusiona a todos llega a cuenta de Sergio Araujo, ya integrado con el grupo tras superar el coronavirus y habiendo cumplido el tiempo mínimo de entrenamientos individualizados. No se anunciaba su regreso hasta dentro de un par de semanas, en cálculos de Pepe Mel, pero para nada queda descartado que entre en la convocatoria del próximo domingo y tenga algunos minutos. A todos ha sorprendido su buena condición física y con lo que queda por delante para medir fuerzas al Fuenlabrada, Araujo podrá adquirir más agilidad tras varias semanas de confinamiento.

Pero si el ariete argentino es la cara, la cruz corresponde a Fabio González, de quien se ha confirmado que sufre un esguince en el ligamento colateral interno de su rodilla derecha y que le obligará a estar de baja tres semanas, lo que le sitúa ya, directamente, en el mes de octubre.

El canterano se perdió la visita a Butarque tras lastimarse, de manera fortuita, en un choque durante un entrenamiento en las horas previas, y trabaja ya en su recuperación y con alto grado de ánimo según evidenció con un mensaje en las redes sociales: «¡Volveremos más fuerte que nunca! ¡Deseando estar ya en el verde!», escribió el mediocentro de Ingenio. Mel ya lamentó su ausencia al considerarlo el «jugador-ancla» del equipo, por su posición en el campo como seis puro, y con el que había hecho todos sus ensayos durante los preparativos para el calendario. Eso sí, en la zona ancha dispone de un amplísimo fondo de armario como bien se pudo comprobar, incluso teniendo que cubrir, también, la ausencia de Javi Castellano, aún en cuarentena. Maikel Mesa fue suplente y Óscar Clemente, uno de los fichajes, ni siquiera saltó al campo. La apuesta por Sergio Ruiz con Loiodice en el doble pivote descolgando a Kirian como enganche podría tener continuidad a la vista de lo que le ofreció a la UD en la primera parte de Leganés, con control de la pelota y buenas transiciones que no tuvieron descabello en el área local.

En este sentido, aunque lo ideal sería disponer de tanto Fabio como de Javi Castellano, y considerando que ambos estarán de vuelta en un plazo de tiempo relativamente corto si no surgen contratiempos, en el cuerpo técnico consideran que hay recursos de sobra para competir sin coartadas con lo que se dispone en las demarcaciones creativas y de construcción del juego, sin olvidar a canteranos como Pol Salvador, Moleiro o Sato, a los que ya se considera capacitados para asumir galones.

A la espera de rearmar con todas las piezas la zona ancha, lo que sí ofrece motivos para la alegría es ver a Araujo como uno más.

Porque nadie duda de que la UD lo necesita más que nunca mientras se aguarda la contratación de otro delantero para completar la retaguardia.