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Moleiro y Coco juntos, durante un entrenamiento de la pasada temporada. UD LAS PALMAS
2022, el año que elevó a Coco y a Moleiro

2022, el año que elevó a Coco y a Moleiro

fútbol ·

Los canteranos están siendo artífices de la magnífica primera vuelta de una UD que rompe registros

Iván Martín Chacón

Las Palmas de Gran Canaria

Lunes, 26 de diciembre 2022, 16:53

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La UD Las Palmas ha visto la madurez de dos de sus perlas. Por un lado, Saúl Coco, central que a pesar de su corta edad ha adquirido los galones característicos de un zaguero experimentado. Seguro en el corte, sólido en defensa, buena salida de balón, solvente ante cualquier adversidad. Y por otro lado, Alberto Moleiro. El tinerfeño ha tenido una progresión muy notable. Sin duda, es de lo más peligroso en ataque de la UD. Sin Viera, es él quien se pone el equipo a la espalda y tira del carro. Su capacidad de desborde, regate, y su particular cambio de ritmo, van en la esencia de un joven de 19 años que lleva el cartel de promesa del fútbol mundial.

El internacional por Guinea Ecuatorial, Saúl Coco, tuvo su eclosión tras la Copa África celebrada en 2021. Desde la llegada de García Pimienta al club, en febrero de este año, Coco ha sido pieza clave y fundamental en los esquemas del entrenador. Esta campaña acumula 17 encuentros como titular de los 21 que se han disputado en liga. El técnico confía mucho en él, y está por delante de Sidnei, a priori, mejor posicionado a principio de temporada para ser titular.

Sin embargo, el lanzaroteño se ha consagrado como jugador indiscutible para la UD ejerciendo de último hombre con un papel meritorio ante cualquier síntoma de debilidad que muestren sus compañeros. Asentado ya en el eje de la zaga, junto a Eric Curbelo, conforman una de las pareja más seguras en toda la categoría de plata.

Incluso el Osasuna ya ha puesto la mirada en él. El internacional está en la agenda de varios equipos, entre ellos el Club Atlético Osasuna, que le vigila desde hace semanas. Con contrato en vigor hasta 2025, no está en mente que Coco abandone la disciplina amarilla a corto plazo.

Por su parte, Alberto Moleiro, internacional en categorías inferiores con España, ha despertado un gran interés en clubes de primer nivel como el FC Barcelona. El pasado verano hubo una cumbre entre ambos presidentes, pero no se llegó a un acuerdo. La UD renovó al tinerfeño hasta 2026 y le impuso una cláusula de rescisión disuasoria: 30 millones de euros en Segunda División. El doble, si es en Primera (60). Estas cifras dan una posición de fuerza a la entidad amarilla. De 15 millones para arriba y con condiciones y plusvalías posteriores en base a logros. Moleiro es un jugador top y que ofrece mucho a la UD en la parcela ofensiva. Cuando el 21 no está, el 10 es quien toma la batuta del mando en ataque.

El director deportivo del club, Luis Helguera, tiene que ser el arquitecto de una UD que quiere progresar en todos los sentidos. Desde la ampliación de la Ciudad Deportiva hasta renovar jugadores de la cantera que están en auge como son estos dos jóvenes talentos. Se trata de dos nombres propios internacionales, cotizados y pretendidos por varios clubes de Primera, con los que la UD Las Palmas podría hacer caja. Pero que aportan mucho, siendo ambos algunos de los pilares fundamentales que sostentan la plantilla de Pimienta en lo más alto de la tabla en la Liga Smartbank.

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