Luka Doncic hace historia en la NBA

En una actuación para el recuerdo en el American Airlines Arena de Dallas, el balcánico firmó un partido histórico para terminar con victoria local y unos números de locura. Porque el partido de Doncic, de 23 años, fue descomunal, sencillamente monumental. Sobre todo en los instantes finales, cuando no le tembló el pulso y se echó al equipo completamente a sus espaldas. Y eso que las gradas comenzaron a quedarse vacías al ver la ventaja que tenía el equipo neoyorkino sobre los texanos. Pocos confiaban en una remontada en el último minuto perdiendo de nueve. Luka Doncic sí.

Los que se fueron del pabellón se perdieron una de las remontadas más inesperadas de siempre, con los Mavs logrndo un parcial de 9-1 en 18 segundos y de 12-3 en medio minuto justo. A falta de 44 segundos para el final, los Knicks se imponían con una ventaja bastante clara (110-101), pero apareció Doncic hasta ayudar a que su equipo se pusiera a dos solo puntos a falta de cuatro segundos, más un tiro libre que colocaría a su equipo a un punto pero todavía lejos del triunfo. Al menos aparentemente y para el común de los morales.

Pero entonces apareció la picardía del esloveno para fallar el tiro libre y ser capaz de capturar el rebote para anotar una canasta que forzaba la prórroga ante el delirio de la afición de Dallas. En el tiempo extra, Doncic abrochó el mejor partido de la temporada regular y uno de los más grandes de todos los tiempos para dar la victoria a los Mavericks y borrar de un plumazo el récord en la franquicia de Dirk Nowitzki. Doncic, que compite contra los rivales y contra sus propios registros, mejoró su plusmarca de puntos con 60, tras los 51 firmados el año pasado contra Los Angeles Clippers, y de rebotes (21).

James Harden, estrella de los Philadelphia 76ers, era hasta ahora el único jugador que había conseguido un 'triple-doble' con 60 puntos (a los que añadió 10 rebotes y 11 asistencias) y solo los míticos Wilt Chamberlain y Elgin Baylor habían logrado otros con al menos 50 puntos. Además, con esos estratosféricos números logrados ante los Knicks, el esloveno se ha convertido en el primer jugador de la franquicia de Dallas con dos noches de tres con al menos 50 puntos: 50 a los Rockets, 32 a los Lakers, 60 a Nueva York. 142 puntos en tres partidos.

Doncic jugó, sumando lógicamente el tiempo añadido, más de 47 minutos. Tiró 31 veces a canasta (21/31), con un dos aciertos de seis en triples y un 16 de 22 desde la línea de tiros libres. El esloveno firmó 16 puntos en el primer cuarto, seis en el segundo, 13 en el tercero, 18 en el último y sieete en la prórroga, unos guarismos que le permitieron salir ovacionado por el público del American Airlines Center.

«Estoy súper cansado», fue su primer comentario tras su histórico partido. «Creo que solo tuve suerte, teníamos dos segundos, lancé el balón y tuve suerte. Íbamos perdiendo por diez puntos, es increíble», agregó el esloveno, como si tal cosa, sobre la jugada al final del partido que terminó forzando la prórroga. Ya en sala de prensa, Doncic dijo sentirse orgulloso de que la gente lo metiese entre un grupo de grandes nombres entre los que están Michael Jordan o Kobe Bryant, entre otros. Suma y sigue el exmadridista.

La actuación del esloveno no tardó en recibir elogios de jugadores y exjugadores de la NBA. Entre ellos, Pau Gasol, que le dedicó un «es irreal» en un tuit. Otro que reaccionó y dedicó un aplauso al jugador de los Mavs fue Kevin Durant, que fue más contundente: «Es una actuación del modo mi jugador. Parece un videojuego de m*****». Kristaps Porzingis se deshizo en elogios ante la exhibición del esloveno. «Este tío no es normal», confesó el letón.

Jugando con el reciente homenaje que recibidió una leyenda de los Dallas Mavericks como Dirk Nowitzki, Kevin Garnett bromeó diciendo que «habrá otra estatua en Dallas, la de Luka Doncic». Todas las estrellas rendidas a Doncic.