Los grupos desoyen la «sugerencia» del Parlamento y asistirán al pleno

La «recomendación» del Parlamento de celebrar el debate del estado de la nacionalidad con el hemiciclo casi vacío ha caído en saco roto. En consonancia con las restricciones impuestas por las autoridades sanitarias, la Cámara ha ido modificando las condiciones para la celebración de esta sesión y entre las medidas adoptadas figura la sugerencia de que los diputados sigan el pleno de forma telemática y de que solo asistan de manera presencial los portavoces, presidentes y parlamentarios que deban intervenir.

Pero la oposición decidió que no iba a dejar todo el escenario en exclusiva al presidente del Gobierno. Tanto Coalición Canaria como Partido Popular han anunciado que harán caso omiso de este aviso puesto que se trata solo de una «recomendación» y hoy asistirán en peso al pleno aunque guardarán las medidas de seguridad que se mantienen en cualquier pleno. En el caso de los nacionalistas, solo cinco de sus diputados harán un seguimiento telemático, y los 15 restantes se alternarán entre la sala de plenos y la sala Europa.

Y ante esta posición, los grupos que apoyan al Ejecutivo han hecho lo propio. Ayer y vía telefónica convocaron a «los suyos» y se apuntan al modo presencial. Desde el Partido Socialista se indica que «todos» sus parlamentarios acudirán al debate, la misma decisión que se ha adoptado en el grupo de Podemos y NC.

De otra manera, y en aras de la seguridad sanitaria, Ángel Víctor Torres tendría que ofrecer su discurso para un hemiciclo casi vacío y dirigirse durante más de una hora solo a una cámara de televisión. El Parlamento ha decidido que en el hemiciclo ni siquiera esté todo el Gabinete y los consejeros que no formen parte del Gobierno tendrán que seguir el pleno en otra sala a través de una pantalla. De forma telemática también la seguirán asesores, jefes de gabinete o jefes de prensa, cuya presencia también ha sido restringida por el Parlamento en cumplimiento de los protocolos para evitar contagios.

El debate del estado de la nacionalidad es, junto con el de la ley de presupuestos, el más relevante que se celebra en la Cámara y en el que hasta ahora, hacían acto de presencia cargos públicos, invitados y un enjambre de medios de comunicación a la búsqueda de declaraciones de cualquier representante político y relativas a cualquier asunto de actualidad. Los corrillos en los pasillos del Parlamento, en ocasiones el área más concurrida y animada durante los plenos, también han pasado a mejor vida. Incluso los medios de comunicación tendrán acotada la movilidad.