Telde proyecta encargar a Gesplan la gestión del servicio de recogida de animales

Artiles explica que los técnicos municipales ya estudian la propuesta económica que les ha presentado la compañía, que atesora, además, una sobrada y acreditada experiencia en estas lides, pues, no en vano, lleva la gestión del albergue insular de animales, situado en Bañaderos (Arucas).

El montante económico anual ascendería a entre 250.000 y 300.000 euros, pero sería un encargo de máximos, para el presente y el futuro, tanto para la gestión del albergue actual, dotado con 16 habitáculos, como para el que se pretende habilitar, que tendría unas 40 jaulas. «Las certificaciones se ajustarían a los servicios prestados», aclara el concejal.

Ese acuerdo de encargo, para cuya aprobación bastaría la Junta de Gobierno Local, incluiría un titulado superior como responsable del servicio, dos auxiliares veterinarios, otros dos para sustituirlos en vacaciones y cuatro operarios más para las recogidas.

El Ayuntamiento solo pondría las instalaciones. El resto lo asumiría Gesplan, desde los equipos de protección individual o material epi hasta los vehículos y su combustible, la vigilancia de la salud de los animales acogidos, la limpieza de las instalaciones, la gestión de los residuos y de los cadáveres, la atención veterinaria o la contratación de un hospital para esterilizaciones o, incluso, cirugías urgentes. Además, Telde ha solicitado también un servicio de asesoramiento veterinario.

«Supondrá un salto cualitativo en la gestión del servicio en Telde, que subiría dos o tres escalones respecto al actual y nos permitiría afrontar con garantías las nuevas obligaciones que fija la ley nacional de Bienestar Animal, que entrará en vigor en septiembre», subraya Juan Francisco Artiles.

Su intención es agilizar los trámites para tener hecho el encargo en octubre próximo, que es cuando expira el contrato con la empresa que actualmente presta el servicio, a la que ya se le ha comunicado que se no le renovará. El acuerdo era por 4 ejercicios, pero renovable año a año. Al final solo ha estado durante una anualidad.

Mientras tanto, Bienestar Animal sigue buscando nuevos emplazamientos para el albergue. El actual, con 16 jaulas, se ha quedado pequeño, de ahí que ya se haya solicitado formalmente a Patrimonio la cesión y uso temporal de la nave de Siete Puentes. Tampoco descartan un uso compartido y provisional de instalaciones en Lomo Pollo.

Y, por otra parte, el área económica municipal trabaja para encargar a Valora el cobro de las sanciones por infracciones de la normativa en Protección Animal, que hasta ahora no se estaban cobrando. «Necesitamos avanzar hacia una sociedad más amable y respetuosa con los animales», concluye Artiles.