La protección de los Ranchos de Ánimas como BIC avanza
Gran Canaria ·
La declaración como Bien Inmaterial de la Cultura Popular tiene informes a favor del Museo Canario y la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria
El Cabildo ha abierto el periodo de información pública del expediente que ha iniciado para la declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) de los Ranchos de Ánimas de Valsequillo, La Aldea de San Nicolás y Arbejales (Teror) en la categoría de bien inmaterial de la cultura popular y tradicional de ámbito insular.
La declaración como BIC dispone de informes favorables del Museo Canario y de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y había sido solicitada por los plenos de los tres ayuntamientos entre 2017 y 2018 para «proteger una manifestación etnográfica» que sigue desarrollando «una función social y religiosa de forma ininterrumpida, al menos desde el siglo XVII».
Por su antigüedad, singularidad, relación con la cultura funeraria tradicional popular y ritual, contenido y expresión musical, religiosidad, espiritualidad y creencias, los tres Ranchos de Ánimas «gozan de los sobresalientes valores que exige la ley para su incoación como BIC», recoge el informe en que se basa la propuesta.
El Cabildo retomó en noviembre de 2022 la incoación de este expediente tras haber caducado en 2019 el iniciado en 2018. Siguiendo la normativa regional, tuvo que esperar dos años para reiniciar la propuesta que compete aprobar definitivamente al Gobierno de Canarias.
Solo sobrevive en la isla
«Sus aspectos formales, simbólicos, musicales, espirituales y sociales responden a un tronco cultural común», agrega el informe sobre los Ranchos de Ánimas que propone su protección como BIC. «Estamos ante una expresión inmaterial de las más antiguas de la isla» con múltiples significados y que tiene en las generaciones de personas que la han mantenido y en las comunidades que la reciben, respetan y consideran a «los auténticos responsables de que este patrimonio inmaterial llegue hasta nosotros en el siglo XXI», explica.
En la actualidad esta expresión de religiosidad y cultura popular solo se mantiene activa en Gran Canaria, «vinculada al universo de las creencias antiguas del cristianismo y de tradiciones paganas mediterráneas e, incluso, de supuestas reminiscencias aborígenes, dedicado al culto a las ánimas», añade la propuesta.
Desaparición en siglos XIX y XX
A lo largo de los siglos XIX y XX se produjo la progresiva desaparición de los Ranchos de Ánimas que existían en Gran Canaria, quedando testimonios de su presencia en Tejeda, La Pardilla y Lomo Magullo/Arenales (Telde), Tasarte (La Aldea de San Nicolás), Ingenio y Juncalillo/Barranco Hondo (Gáldar).
En su origen, en el XVII, casi todas las parroquias de la isla contaban con cofradías que a su vez tenían vínculos con los ranchos de cantadores que recaudaban fondos para las misas o para las cofradías de las ánimas. Según la investigación que acompaña la propuesta de declaración como BIC, en un principio las cofradías y los ranchos eran una misma entidad encargada de recaudar fondos para la iglesia.
