Un vecino de Marzagán solicita ayuda para no quedarse en la calle
José Luis Martín debe abandonar mañana la vivienda en la que entró al no poder continuar pagando un alquiler al quedarse en el paro
Mañana jueves, a las 10.00 horas, José Luis Martín tendrá que dejar la vivienda que okupó «hace dos meses escasos» en Marzagán, después de haber perdido su empleo y haber sufrido unos problemas de salud que le hacen tomar «17 pastillas diarias».
Asegura que la vivienda en la que entró entonces «ya había estaba okupada por otras personas que se fueron» y que él se enteró por «el boca a boca» y se decidió a meterse en ella porque con los 286 euros de la PCI que percibe como único ingreso no se puede costear un alquiler.
Apunta que la orden de lanzamiento que le llegó el 29 de julio y que firmó no venía a su nombre, sino al de un antiguo okupante de la casa, «pero con los nervios no me fijé y la firmé». Así que ahora tendrá que dejar esta casa «con todos lo enseres que hay en ella, que son míos, porque aquí no había nada e incluso arreglé una pared que estaba rota», porque dice que cuando se metió en la casa «era todo miseria».
Añade que ahora su futuro es incierto porque tras quedarse en el paro ha tratado de buscar trabajo sin éxito. «He trabajado de vigilante y en la hostelería, pero he ido desde Las Canteras a Puerto Rico buscando trabajo y no he encontrado nada».
Dice que su edad, 53 años, se suma a las dificultades actuales que la crisis generada por la pandemia provoca a la hora de conseguir un empleo.
Además, señala que no cuenta con apoyo familiar porque su hermana, que vive en Fuerteventura, no está en condiciones de echarle una mano.
Explica que ha tratado de contactar con los servicios sociales del Ayuntamiento para pedir una ayuda al alquiler, pero que cuando por fin consiguió que le cogieran el teléfono «me dieron cita telefónica para el 17 de octubre».
Reconoce que esta orden de desahucio, aunque no esté a su nombre, «me deja en la calle». Por eso solicita ayuda en forma de techo y pide que «si alguna persona necesita que le cuiden un terreno» él está dispuesto a hacerlo a cambio tener un espacio en el que habitar.