Guaguas se suma a la denuncia contra el agresor del chófer de la L2

Guaguas Municipales, que lamentó el incidente, mostró de manera pública su máximo apoyo para «que el agresor afronte las consecuencias de sus actos».

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El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y Guaguas Municipales enviaron «un mensaje de tranquilidad tanto a los trabajadores de la propia empresa como a los usuarios del servicio de transporte público colectivo de la ciudad, ya que viajar en guagua es seguro». Y aclaró, en otro punto de su comunicado, que «este lamentable incidente no refleja el comportamiento de la inmensa mayoría de los usuarios de guaguas».

«Igualmente, Guaguas Municipales seguirá mejorando sus protocolos, siempre en coordinación con los trabajadores, y persiguiendo a los incumplidores, para seguir prestando el mejor servicio posible a la ciudadanía», añadió.

El protocolo en vigor categoriza las agresiones en tres niveles: el primero, denominado violencia leve, comprende el abuso, el acoso psicológico y comportamientos incívicos; el segundo incluye las agresiones verbales y las actitudes amenazantes, físicas y verbales; y el último se reserva para los casos más graves de violencia.

La aplicación de este protocolo es considerada ahora, por parte de los trabajadores, como insuficiente, de ahí que reclamen ser reconocidos como autoridad, desde el convencimiento de que un endurecimiento de las penas en caso de agresión tendrá un efecto disuasorio entre los potenciales abusadores.