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Una larga negociación entre la dirección del servicio municipal de Limpieza y sus trabajadores concluyó ayer en un acuerdo in extremis que permitirá que los empleados públicos puedan recibir el montante total de sus salarios. Para ello, las dos partes decidieron darse un periodo de tres meses, de modo que, en ese plazo, se puedan trasladar algunos pluses (horas extra, superior categoría, nocturnidad y prorrateo de pagas) a los nuevos conceptos que fija la Relación de Puestos de Trabajo (RPT), después de que desde Intervención se pusiera reparos por no estar concluido el proceso de adscripción provisional y, por tanto, no estuviera lista la correspondencia entre la situación anterior y la RPT.
En principio, el abono de las nóminas no debería sufrir merma alguna, aunque si se diera el caso, esas cantidades se tendrían que ingresar pasados esos tres meses de colchón.
En este periodo provisional, las nóminas se confeccionarán con dos conceptos retributivos: las retribuciones básicas, que incluye el sueldo base, la antigüedad, el plus de convenio y los incentivos; y un complemento provisional denominado 'diferencias provisionales retribuciones RPT 2021', que incluye al resto.
El Ayuntamiento se había comprometido a aplicar una subida salarial del 25% en 2020 y del 50% en 2021, pero no las ha aplicado, incumpliendo el acuerdo adoptado en noviembre.
El concejal de Coalición Canaria-Unidos por Gran Canaria, David Suárez, acusó ayer a la concejala de Servicios Públicos, Inmaculada Medina, de «chantajear a los representantes de los trabajadores, que si no entraban por el aro se quedaban sin cobrar este mes». Dijo que desde enero se conocía la memoria económica de la RPT pero «la gestión del PSOE hizo peligrar la nómina».
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